Podemos contra todos: enerva al CGPJ por sus ataques al Supremo y se querella contra Batet
El caso del diputado Rodríguez provoca una ofensiva contra el Judicial y el Legislativo y tensiona el Gobierno
Podemos cargó ayer contra todos los poderes del Estado. El cese del diputado Alberto Rodríguez provocó una ofensiva contra el Judicial y el Legislativo y tensionó la coalición de Gobierno.
Por la mañana, la ministra Ione Belarra compartió en su cuenta de Twitter ... un comentario en el que asegura textualmente que «Alberto Rodríguez fue condenado a pesar de que las pruebas demuestran que él no estuvo allí. El objetivo era quitarle el escaño. El Supremo presiona a la Presidencia del Congreso para retirárselo aunque ambos saben que no es lo que dice la sentencia. Prevaricación». La respuesta del Poder Judicial llegó por la noche: la Comisión Permanente del CGPJ consideró que estas manifestaciones « merecen un absoluto y rotundo rechazo, si cabe con mayor intensidad y rotundidad que en otras ocasiones, especialmente porque más allá de generar una sospecha inaceptable respecto del proceder del más alto tribunal de la Nación llegan a atribuir la comisión de un delito a sus magistrados». «Exceden absolutamente los límites del derecho a la libertad de expresión, máxime cuando quien realiza esas manifestaciones es un miembro del Poder Ejecutivo, lo que sitúa las relaciones entre dos poderes del Estado en un plano completamente indeseable», concluyó el comunicado.
Entre tanto, a media tarde Unidas Podemos anunció que se querellará contra la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, por «prevaricación» después de inhabilitar a Rodríguez. Además, siguieron acusando al tribunal de condenarle «sin pruebas». Fuentes de Unidas Podemos denunciaron que «Batet ha tomado la decisión (...) de manera unilateral, contra el criterio de los letrados de la Cámara y de la Mesa del Congreso».
«Prevaricación, vergüenza»
Por su parte, el portavoz parlamentario de Unidas Podemos, Pablo Echenique, se pronunció en la misma línea que su líder. «Condenaron a Alberto Rodríguez sin pruebas. Aún así, en la sentencia no figura la retirada del escaño», dijo. Y añadió: «Hoy Batet ha cedido a las presiones de Marchena y de la (ultra)derecha política y mediática que pedían sangre y, encima, lo ha hecho aún a riesgo de prevaricar. Vergüenza». Desde Unidas Podemos insisten en que la condena del TS no conlleva su inhabilitación.
La vicepresidenta segunda y líder de Unidas Podemos, Yolanda Díaz, no escribió ningún mensaje al respecto en sus redes sociales, no acostumbra a participar en las campañas de Podemos ni ha cargado con ellos contra otros poderes del Estado. Sin embargo, su antecesor en el cargo, el exvicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias, sí dejó ayer en su perfil de Twitter su valoración. «Contra el criterio de los letrados del Congreso y tras las presiones de Marchena y la derecha, Meritxell Batet, que sabe además que el juicio contra Alberto fue impresentable, le retira el acta de diputado. Como en la República de Weimar, el monstruo avanza con aliados », atizó.
A última hora, el PSOE resaltó su «respeto absoluto a la independencia judicia» y respaldó a Batet: «El Partido Socialista respalda su actuación en el cumplimiento escrupuloso de su deber».
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