Los Reyes presiden la primera Pascua Militar en estado de alarma
La ministra de Defensa, Carme Chacón, realiza un balance de 2010 y rinde homenaje a los soldados españoles que trabajan por la paz en las misiones en el exterior, destacando su «valor y generosidad»
Sus Majestades los Reyes, Don Juan Carlos y Doña Sofía, acompañados por los Príncipes de Asturias, don Felipe y doña Letizia, llegaron en torno a las 12 horas al Palacio Real de Madrid para presidir los actos conmemorativos de la Pascua Militar.
A pie ... de coche fueron recibidos por el presidente del Gobierno, los ministros de Interior y Defensa y el jefe de Estado Mayor de la Defensa (jemad), todos ellos vestidos de gala. El Rey lucía uniforme de gala del Ejército de Tierra con el empleo de capitán general de los tres ejércitos, mientras que el Príncipe vestía traje de gala de teniente coronel del Ejército del Aire. Por su parte, la Reina escogió un vestido de tonos verdes y la princesa Letizia llevaba un vestido color azul grisáceo.
Tras el saludo inicial, una formación de miembros de la Guardia Real rindió honores al Rey y a la Reina . Después, todos los miembros de la Familia Real y del Gobierno se adentraron en el Palacio para la correspondiente recepción oficial.
A pesar del tiempo desapacible y de la constante amenaza de lluvia de los cielos madrileños, más de un centenar de personas se acercaron hasta el Palacio Real para presenciar los actos conmemorativos, un público que aplaudió la llegada de la Familia Real.
En el interior del Palacio, en la Saleta Gasparini, los Reyes y los Príncipes recibirán el saludo de los militares y, después de la imposición de condecoraciones, el Rey, como capitán general de los ejércitos, y la ministra de Defensa -con traje negro de chaleco y pantalón- pronunciarán sus respectivos discursos, en los que harán balance y definirán los retos para las Fuerzas Armadas en este 2011.
La celebración de la Pascua Militar data de 1792 y fue instituida por Carlos III como muestra de reconocimiento a los Ejércitos suele servir al Rey y al titular de Defensa para hacer balance del año anterior y marcar retos futuros . Se celebra siempre un día después del cumpleaños del monarca, que ayer cumplió 73 años. En esta recepción, el Rey recibe a los responsables del Estado Mayor de la Defensa, de los tres ejércitos, de las Reales y Militares Órdenes de San Fernando y San Hermenegildo, de la Guardia Civil y de la Hermandad de Veteranos. Además de las palabras del Rey, la ministra de Defensa, Carme Chacón, se dirigirá por tercera vez en este evento con un discurso a la cúpula militar y los máximos mandos de la jefatura de las Fuerzas Armadas.
Sin corrillos, por tercer año consecutivo
Por último, la Familia Real celebrará la tradicional recepción a las autoridades asistentes , a la que, como viene sucediendo desde 2009, no podrá acceder la prensa acreditada al acto institucional. De esta manera, por tercer año consecutivo, tras el acto no tendrán lugar los denominados "corrillos" o charlas informales de los periodistas con las autoridades asistentes.
Los ejes del último discurso
En su discurso de la Pascua Militar de 2010, el Rey defendió que España debe "potenciar" su papel internacional y estar preparada para afrontar "amenazas complejas e inciertas", que pueden causar "daños indiscriminados", junto a "los riesgos y amenazas tradicionales para la paz y seguridad". Además, el monarca destacó la importancia de "afianzar" el modelo de las Fuerzas Armadas profesionales, "mejorando de manera continua la formación y las expectativas profesionales", y elogió la labor de los militares españoles, que "con su buen hacer, impulso decidido y liderazgo, proyectan la imagen de España como gran nación moderna, comprometida con la paz, la democracia, los derechos humanos y la construcción de un mundo mejor". Por su parte, la ministra de Defensa aprovechó su discurso para dar a conocer los ejes de la futura Ley de Derechos y Deberes de los miembros de las Fuerzas Armadas y condicionó su tramitación a la existencia de un "amplísimo consenso" entre los grupos parlamentarios. Este proyecto de ley todavía no ha sido aprobado y se encuentra en estos momentos ante el trámite de enmiendas en la Cámara Baja, pero Chacón espera que pueda recibir su luz verde definitiva antes de verano.
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