El Gobierno confía en convalidar 'in extremis' y por la mínima el uso obligatorio de mascarillas en exteriores

La treta del Gobierno de coalición, repetida a lo largo de la legislatura, ha generado incomodidad no solo en la oposición, sino también entre algunos de sus socios habituales. La sensación es que el Ejecutivo somete a «chantaje» al Legislativo al entremezclar en el mismo decreto asuntos tan variopintos como el uso de mascarillas en el exterior -que genera un rechazo que trasciende el habitual eje ideológico-, con la actualización de las pensiones u otros asuntos como la contratación extra de médicos y enfermeros por la pandemia del Covid-19 .

El Gobierno llega al pleno de este martes sin los respaldos garantizados. Ayer mismo desde el PSOE se trasladaba que aún seguía «consolidando» los apoyos. En una semana clave para la coalición, en la que el jueves se debate el decreto sobre la reforma laboral , socialistas y Unidas Podemos llegan al examen final sin los deberes hechos. Fuentes de los socios habituales del Ejecutivo consultadas por ABC reconocían ayer a este diario que su voto oscila entre la abstención y el no. Igual que han hecho públicamente partidos de la oposición como Ciudadanos (Cs), manifiestan que están «muy molestos» con la mezcla de mascarillas y pensiones en el mismo texto.

A lo largo y ancho del arco parlamentario, son muchos los partidos que exponen que el Gobierno podría haber dividido mascarillas y pensiones en dos decretos distintos. Partidos como el PNV y Junts , por ejemplo, aseguraban ayer que no tenían aún decidido su voto, como tampoco el PDECat . ERC y EH Bildu han preferido guardar silencio y no pronunciarse hasta este mismo martes.

El PSOE y Unidas Podemos, además de sus propios votos, solo tienen garantizados, según las consultas hechas por ABC, los apoyos de Coalición Canaria, Nueva Canarias y el Partido Regionalista de Cantabria (PRC). Sus 157 escaños asegurados superan los que están confirmados en el bloque del no: PP (88), Vox (52) y Cs (9), a los que seguramente se unan, como es habitual, UPN (2), Foro Asturias (1) y el tránsfuga Pablo Cambronero. Aunque la votación estará ajustada, con 157 votos a favor y 153 en contra, el decreto vería luz verde si el resto de formaciones deciden al menos abstenerse. Pero si empiezan a unirse partidos a los noes, el escenario se le complicará al Gobierno.