Los fiscales Anticorrupción acusados de coacciones y obstrucción a la justicia llamarán a declarar a su jefe

Como ya informó ayer ABC Moix se reunió con el denunciante, Rafael Pallardó, sin decírselo a los fiscales del caso, le tomó declaración personalmente -lo hizo el 28 de marzo en su despacho, en el que también estaba el abogado de Pallardó- y finalmente , el 5 de abril envió un escrito al fiscal superior de Cataluña, José María Romero de Tejada para que se hiciera cargo del asunto, ya que los hechos habrían ocurrido en Barcelona y «aparecen indiciariamente constitutivos» de delito , a criterio del jefe Anticorrupción.

Pallardó sitúa la reunión en la que se habrían producido las coacciones en Barcelona el 12 de marzo de 2015; es decir, nada menos que más de dos años antes de su denuncia . Los fiscales, por su parte, la sitúan el 30 de octubre del año anterior y contaron con la autorización del entonces fiscal jefe Anticorrupción Antonio Salinas , y del que era fiscal general del Estado, Eduardo Torres Dulce , para asistir a ella.

La cita se produjo a instancias de Pallardó y sus abogados , que ofrecían información relativa al caso Pujol. La reunión acabó en el momento en que el investigado por la mafia china pidió a los tres fiscales dinero de los fondos reservados por esos datos, o en su caso que negociarán con el diario «El mundo» para que pagase por esa documentación. Rosa, Bermejo y Grinda le dijeron que la Fiscalía no pagaba y ahí acabó todo. Así lo informaron en su momento a sus superiores .

Más de dos años después Pallardó afirma haberse sentido «francamente coaccionado por cuanto tenía miedo de perder las promesas de favores procesales que me habían hecho» . Lo cierto es que la situacón procesal de este individuo no ha cambiado en momento alguno , aunque a nadie se le escapa que la colaboración con la justicia siempre conlleva beneficios para quien emprende ese camino. No ha sido el caso.

Pallardó también vincula una declaración que hizo en Andorra a instancias de su abogado con un policía de allí con una supuesta maniobra de Grinda al parecer en connivencia con el fiscal general del Estado del Principado . Y también con la inmediata detención del consejero delegado de BPA Joan Pau Miquel y la intervención de la entidad a los hermanos Higini y Ramón Cierco .

El primer elemento interesante en relación a este asunto es que desde hace un mes -por tanto, coincidiendo con la denuncia a los fiscales tramitada por Moix-, los hermanos Cierco y Pallardó comparten abogado, Javier Iglesias . Y casualmente lo es asimismo del investigado en el caso Clotilde que también ha presentado denuncia , en este caso solo contra Grinda: Santiago Roselló , acusado de blanquear un millón de euros, lo que reconoce uno de los imputados en la causa. El escrito de acusación de ese sumario ya está presentado a Moix, que aún no ha dado su visto bueno, necesario para poder ser presentado.

Los hermanos Cierco ya han denunciado en el Principado al director de la Unidad de Inteligencia Financiera de Andorra y al excomisario de Asuntos Internos , Marcelino Martín Blas. Es significativo que el millonario excomisario José Manuel Villarejo entregara a Higini Cierco unas minutas que él mismo había redactado para que pudiera utilizarlas en sus denuncias en Andorra. La mediación entre ambos la hizo el abogado Iglesias, según el polémico expolicía.

Y más relevante aún es que el jefe de Anticorrupción, Manuel Moix, se reuniera también con Higini Cierco en presencia de una tercera persona sin que, una vez más, los fiscales que llevan el caso Banco Madrid -José Grinda y Juan José Rosa-, en el que está investigado este individuo, lo supieran.

Como se sabe, los tres fiscales, ante la falta de respaldo de Moix, decidieron pedir amparo al fiscal general del Estado , José Manuel Maza, que se pronunciará una vez oído el Consejo Fiscal, que se reúne el miércoles. Los fiscales afirman sentirse «perturbados e inquietados» en el ejercicio de sus funciones .

Todos los fiscales Anticorrupción de Madrid respaldaron por escrito a sus compañeros, un hecho sin precedentes . Estos mismos fiscales ya habían mostrado su apoyo casi de forma unánime al criterio de sus compañeros que llevan la operación Lezo en contra del sostenido por Moix, que tuvo que dar su brazo a torcer.

El episodio, como se sabe, ha provocado una importante polémica política hasya el punto de que el Congreso someterá a votación la reprobación del jefe de la Fiscalía Anticorrupción y del fiscal general del Estado, lo que tampoco tiene precedentes.