Dos etarras detenidos en Gerona cuando huían a Francia
En lo que va de año son ya tres las operaciones contra ETA desarrolladas en puestos fronterizos. A las de Bermillo de Sáyago (Zamora) y Portbou se sumó ayer la de Camprodon, también en Gerona. En esta última localidad, los Mossos d´Esquadra detuvieron en un ... control rutinario a los etarras Adur Aristegi Aragón y Jon Rosales Palenzuela -ambos estaban en libertad bajo fianza- cuando intentaban pasar a Francia en una furgoneta Renault Traffic propiedad del padre de uno de ellos. Las Fuerzas de Seguridad buscan en Cataluña a un tercer etarra.
Rosales había sido captado por el «liberado» Ibai Beobide, detenido el pasado sábado por la Guardia Civil cuando preparaba la dinamización de dos «comando» de «legales» en Guipúzcoa y Vizcaya dentro de la ofensiva con la que dirección etarra pretende golpear la presidencia española de la UE.
Los Mossos d´Esquadra detuvieron a Adur Aristegi Aragón y Jon Rosales Palenzuela, que no iban armados, en Molló -pequeño pueblo fronterizo situado cerca de Camprodon (Gerona)-a la una y media de la tarde de ayer cuando circulaban en una furgoneta Renault por la carretera C-38, que une Molló con Francia. Los arrestos los llevó a cabo una patrulla de las brigadas «Arro» de los Mossos (especializados en seguridad ciudadana), que había establecido un control antiterrorista rutinario, de los que se instalan de forma concertada con la Policía Nacional y la Guardia Civil.
Los agentes solicitaron la documentación a los dos ocupantes del vehículo y comprobaron que uno de ellos, Jon Rosales, vecino de Guecho (Vizcaya), era buscado por la Guardia Civil, por su estrecha vinculación con Beobide. A ello se sumaba que ambos tenían prohibido abandonar España por estar encausados en sendos sumarios de la Audiencia Nacional. Los terroristas mostraron a los agentes sus documentos de identidad auténticos, aunque portaban también varios falsos.
Dio su nombre
El nombre de Rosales lo reveló Ibai Beobide. En su declaración ante la Guardia Civil, el «liberado» confesó que le había captado, así como a un segundo individuo. Desde entonces Jon Rosales era buscado por la Benemérita mientras que Aristegi era investigado por la Policía Nacional. De la fuga de estos individuos se tuvieron sospechas hace unos días cuando los agentes comprobaron que habían desaparecido de sus domicilios después de la detención de Beobide, quien se autolesionó para de esta forma llamar la atención y poner en alerta a sus compinches.
«Etarras quemados»
El hecho de que ETA haya tenido que echar mano de dos etarras «quemados», pues están en libertad bajo fianza, demostraría que la banda no dispone de elementos suficientes para nutrir sus «comandos». Así, Rosales fue detenido por participar en actos de «kale borroka» mientras que a Aristegi está procesado por su vinculación con el «comando Vizcaya» desarticulado en julio de 2008.
El consejero de Interior, Joan Saura, afirmó ayer en rueda de prensa que no le consta que ETA tenga una base operativa en Cataluña, pese a la detención en esta Comunidad, en dos días, de tres etarras. Fuentes de la lucha antiterrorista consideran que los terroristas utilizaron esta frontera con Francia al creer que está menos controlada que las del País Vasco o Navarra.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete