La Audiencia Nacional condena al PP por beneficiarse de la trama Gürtel en Boadilla

Entre ellos, figuran el líder de la trama Gürtel, Francisco Correa ; su número dos , Pablo Crespo ; el exalcalde de Boadilla Arturo González Panero; el que fue contable de la red, José Luis Izquierdo ; su asesor fiscal José Ramón Blanco Balín , el asesor fiscal de la trama; el exgerente de la Empresa Municipal de Suelo y Vivienda (EMSV) Tomás Martín Morales y su sucesor, el exdiputado Alfonso Bosch , además de varios empresarios y constructores, de acuerdo a la sentencia a la que tuvo acceso ABC.

Esos más de 200.000 euros se pagaron con facturas falsas y comisiones ilegales aportadas por Correa, por ejemplo los 30.000 que pagó el empresario Alfonso García-Pozuelo, propietario de Constructora Hispánica, para las elecciones municipales y autonómicas de 2003. O los 120.000 que puso la empresa Teconsa y que se destinaron a actos del PP en Boadilla. Hay otras dos cantidades de unos 25.000 y 29.000 euros procedentes de las empresas de Correa.

El juicio, que se celebró en la Audiencia Nacional a finales del año pasado, sentó en el banquillo a políticos, empresarios, funcionarios y otras personas que participaron en la trama de corrupción liderada por Correa y González-Panero, también conocido como 'El Albondiguilla' , en este ayuntamiento madrileño entre 2001 y 2009.

El 'modus operandi' consistía en adjudicar numerosas obras, servicios o parcelas municipales a empresas de Correa y a otras previamente seleccionadas por él, tras lo cual se repartían las correspondientes comisiones ilegales entre todos los participantes en la trama. Según considera probado la Audiencia Nacional, una parte de esas comisiones se destinó a pagar facturas correspondientes a actos, eventos y gastos electorales del Partido Popular, al que pertenecía entonces 'El Albondiguilla' y con el que Correa trabajaba en los mismos términos en otros ayuntamientos madrileños similares.

En total, la Audiencia Nacional ha condenado por estos hechos a 23 personas , pero con una diferencia sustancial. Hasta 16 confesaron antes de sentarse en el banquillo y después lo ratificaron durante el juicio, lo que permitió que éste transcurriera rápido para el elevado número de acusados y testigos implicados. Gracias a ello, las penas que les ha impuesto la Audiencia Nacional son muy inferiores a las que solicitaba inicialmente la Fiscalía. Por ejemplo, Correa y su número dos, Pablo Crespo, han sido condenados a 13,5 años de cárcel cada uno , cuando la petición inicial del Ministerio Público era de 76 y 64, respectivamente.

Lo mismo para el resto de acusados que colaboraron con la Justicia, a los que el tribunal aplica atenuantes de confesión y reparación del daño causado. Correa y Crespo han colaborado para facilitar la repatriación de sus cuentas en Suiza y otros han pagado o han llegado a acuerdos para reparar el daño económico, como el empresario José Luis Ulibarri y los exgerentes de la EMSV Martín Morales y Bosch Tejedor. Estos dos últimos han sido condenados a más de 6 y 4 años de cárcel, respectivamente.

El que no convenció al tribunal fue el otro gran protagonista, el exalcalde González Panero, que ha sido condenado a casi 37 años de cárcel , sólo tres menos de los que solicitaba la Fiscalía antes del juicio, y a multas que superan los 6,5 millones de euro s.

El tribunal entiende que su declaración durante el juicio "no supera un filtro de suficiencia mínimo" para considerarla una confesión "ni ha contribuido en modo alguno a reparar el daño causado por el delito, no existiendo ni un mínimo esfuerzo en tal sentido realizado por él". También añade que el exalcalde reconoció "algunos hechos, pero sólo cuando era ya inevitable por las evidencias que suponía el reconocimiento de otros acusados", entre ellos los 16 mencionados.

Además, el tribunal apunta que González Panero "intenta siempre dar una explicación" para mantenerse "al margen de las decisiones fundamentales" de la trama corrupta "o se presenta como coaccionado o extorsionado para descargar su responsabilidad en terceros", como Correa y su antiguo partido. Por eso le impone la mayor pena entre todos los implicados de la Gürtel en Boadilla por hasta 18 delitos , entre ellos los de asociación ilícita, prevaricación y malversación continuadas, tráfico de influencias y blanqueo de capitales.

También ha sido condenada a tres años de cárcel y multa de 2,1 millones de euros su exnovia y funcionaria municipal Alicia Vallejo por ayudarle a ocultar fondos ilícitos como cooperadora necesaria de un delito de blanqueo de capitales.