Fiscalía y Gobierno advierten que Sortu «está en la órbita de ETA»

El representante de los servicios jurídicos del Estado insistió en la idea de que el nacimiento de Sortu no es fruto de una ruptura entre ETA y Batasuna y negó la existencia real de un “debate sólido y creíble” sobre la conveniencia de abandonar de forma definitiva la actividad terrorista. Utilizando un símil con la órbita de la luna alrededor de la tierra, indicó que “se puede estar más cerca o más lejos, pero siempre dentro de la órbita”. Es decir, Sortu puede apartarse más o menos de los postulados violentos de la banda, pero siempre bajo su área de influencia . Y si ETA ha “tragado” con esta nueva opción política es, sencillamente, según el demandante, “porque está débil y no puede imponer” su voluntad.

Para el fiscal, la legalización de Sortu supondría “un serio riesgo para la sociedad española” , motivo por el cual sería aceptable desde el punto de vista del derecho constitucional recortar el derecho de participación política y de asociación impidiendo la inscripción del partido en el registro de Interior. El representante del Ministerio Público asegura que Sortu pretende ser legalizado “en fraude de ley”. Es decir, haciendo creer que cumple ”el canon de legalidad”.

En su opinión, numerosos documentos de ETA ponen de manifiesto que es la organización terrorista la que ha marcado “la senda”, de lo que se concluye que Sortu forma parte de su “estrategia”. Prueba de ello es, en su opinión, el “paralelismo” constante entre las “iniciativas de Batasuna” y los comunicados de la banda. Desde noviembre de 2009, cada paso de la “izquierda abertzale” viene “avalado” por ETA. “¿Dónde está la ruptura? Ha habido divergencias nada más”, concluyó.

Cerró la vista el abogado de Sortu, Iñigo Iruin, autor de los estatutos de esta formación política. Después de pedir que se apliquen criterios exclusivamente jurídicos, sin injerencias “éticas o morales” y sin “juicios de intenciones”, el abogado aseguró que en los informes elaborados por la Policía y la Guardia Civil se ha ocultado de forma deliberada la existencia en el seno de ETA/Batasuna de un debate –“el debate” con mayúsculas, en su opinión- que ha culminado con la ruptura de la segunda respecto de la actividad terrorista. Dicha ruptura es, de hecho, clave para defender la tesis de Iruín, según la cual Sortu no nace bajo el manto de ETA.

Gran parte de la exposición de Iruín se centró en los estatutos, de cuya lectura puede inferirse que contienen los mecanismos para garantizar que el rechazo a la violencia es real. Con los Estatutos en la mano, “si la tregua se rompe no hay vuelta atrás. Los estatutos establecen un régimen disciplinario severo” que impide, aseguró, “que Sortu pueda ser instrumentalizado” por las organizaciones ilegalizadas. “ETA no va a tener presencia en las instituciones democráticas” a través de Sortu, partido en el que, afirmó, “no caben la abstención y el silencio ante los atentados”.