La Audiencia Nacional mantiene en prisión a Gao Ping porque puede coaccionar a testigos

En un auto, la sección tercera de la Sala de lo Penal desestima el recurso contra el alargamiento de la estancia en la cárcel más allá de los dos años de Gao Ping, considerado el cabecilla de la trama china de blanqueo de capitales desmantelada en la operación Emperador.

Afirma la sala que de lo investigado se extrae que Gao Ping es «el organizador y planificador de toda la actividad» de la trama mafiosa, de forma que «ordena y consiente la utilización de la violencia o de las amenazas para cobrar las cantidades prestadas». También es la persona que «ordena de forma directa las operaciones de envío y salida de dinero de forma irregular de España a la República Popular China» y capta «voluntades ajenas de funcionarios públicos y autoridades públicas españolas en beneficio de la organización».

Los jueces rechazan que, tal y como alegó su defensa, no haya riesgo que se fugue, y afirman que su «importante posición económica» facilitaría «una salida sin problemas del territorio nacional». Además, Gao Ping «mantiene importantes conexiones con su país de origen, ya que la investigación ha puesto de manifiesto la existencia de importantes cantidades de dinero no declaradas y de una contabilidad B aceptada» por él, que se podrían destinar a inversiones tanto en España como en China, como modo de «blanquear ese dinero no declarado».

«El importante entramado societario del que dispone el recurrente no hace si no dificultar la investigación y facilitar la ocultación de los bienes derivados de esa ilícita actividad », asegura la sección tercera.

Si Gao Ping se fugara a China, la extradición a España desde ese país sería denegada por el país asiático, por lo que medidas alternativas a la prisión como la retirada del pasaporte serían insuficientes e ineficaces, destacan los magistrados. «El perjuicio procesal -afirma la sala- que a la ardua y compleja investigación policial causaría una hipotética fuga del ahora recurrente sería gravísimo, hasta el punto de dejar huérfana a aquella de su principal imputado, con los inconvenientes y quebrantos que ello conllevaría».

La defensa del presunto líder de la trama china de blanqueo de capitales desarticulada con la 'operación Emperador' ha asegurado que su cliente nunca ha realizado «acción alguna de carácter intimidatorio, directa o indirectamente», contra ningún coimputado o testigo de la causa.

En un comunicado, el abogado de Gao Ping, Jaime Sanz de Bremond, señala que, transcurridos más de cuatro años desde la incoación del 'caso Emperador' y más de dos desde que se produjeron las detenciones, al empresario «no se le ha imputado hecho concreto alguno que pudiera justificar una afirmación de este tipo».

«Realizar tales afirmaciones sin que haya persona alguna que haya manifestado haber sido objeto de intimidación por parte de Gao Ping, directa o indirectamente, supone situar a mi patrocinado en una situación de absoluta indefensión», señala el representante legal del empresario antes de añadir que, »si no se tiene noticia de ningún hecho concreto« en este sentido es »precisamente porque no ha existido«.

Tras apuntar que el tribunal únicamente ha tenido en cuenta la interpretación que en su día realizó la Fiscalía de las conversaciones telefónicas que obran en el procedimiento, esta parte reitera que las sociedades de Gao Ping y de sus familiares «no han constituido nunca organización criminal alguna»