La doctrina Parot, amenazada

Todo apunta a que la Gran Sala del Tribunal Europeo de Derechos Humanos tumbará en pocas horas esta herramienta legal, que no solo se ha demostrado eficaz para combatir el terrorismo, sino también para otro tipo de delitos de extrema gravedad. La sentencia de Estrasburgo, que resuelve en segunda instancia el recurso de esta etarra (en julio de 2012 le dio la razón), generará un efecto dominó sobre un centenar de terroristas, asesinos en serie, narcotraficantes y violadores (muchos de ellos reincidentes cuando disfrutaban de permiso penitenciario), inmersos en una situación similar a la de Del Río.

La liquidación de la doctrina Parot beneficiaría de manera inmediata a 64 etarras, siete terroristas de los Grapo, uno del Ejército Guerrillero del Pueblo Gallego, dos mercenarios de los GAL, además de 24 presos que cumplen condenas por delitos que causan gran alarma social, como el violador y asesino de la niña Olga Sangrador.

El Gobierno aguarda la decisión de Estrasburgo con gran preocupación, aunque con la serenidad de quien ha puesto todos los medios para mantener vigente esta herramienta legal. La intervención del Abogado del Estado durante la vista, argumentando que para la Justicia no puede ser lo mismo cometer un asesinato que tres, cuatro o veinte, fue muy elogiada también por las principales asociaciones de víctimas del terrorismo. Pero si finalmente la Gran Sala tumba la doctrina Parot, el Ejecutivo no dudará en acatar la sentencia, «porque los convenios internacionales suscritos por España están para cumplirse», subrayan fuentes gubernamentales. Al mismo tiempo, los tribunales españoles están preparados para ejecutar y aplicar el contenido de la resolución.

En cualquier caso, si se confirma la liquidación de este instrumento legal, expertos policiales subrayan que tampoco habrá que afrontar la decisión como una derrota, porque mientras estuvo vigente ha sido de gran eficacia para la lucha contra el terrorismo y los delincuentes más peligrosos. Por lo pronto, ha prolongado la permanencia en prisión de sanguinarios terroristas que, en caso contrario, habrían recobrado la operatividad cuando ETA aún cometía atentados, con la posibilidad de haberse incorporado a las estructuras de la banda. Sin ir más lejos, sin la doctrina Parot la propia Inés del Río habría salido a la calle el 3 de julio de 2008.

Alarma social

Pero la liquidación de esta herramienta, un objetivo perseguido por ETA desde que entró en vigor, va a provocar problemas de seguridad en la estrategia antiterrorista y también en la política contra los delitos que provocan mayor alarma social. Media docena de violadores, algunos reincidentes tras cumplir su primera condena, se verían agraciados por la derogación de esta medida.

Es precisamente esta consecuencia lo que vienen ocultando, no solo la «izquierda abertzale», sino el PNV e incluso el PSE cuando, para aplaudir la liquidación de la doctrina Parot, aluden al nuevo contexto caracterizado por el cese de la actividad terrorista de ETA . Ayer mismo lo dijo el dirigente del PNV Joseba Egibar: la decisión de Estrasburgo «contribuirá a oxigenar el ambiente». Esconden a sus seguidores que se abrirán las celdas a peligrosos violadores y asesinos en serie. Para Sortu y Bildu «venderán» su derogación como un éxito de la «izquierda abertzale» frente al «Estado español que reprime al pueblo vasco» y como un balón de oxígeno para una ETA agonizante que quiere lavar, en su lecho de muerte, medio siglo de genocidio.

El grado de envalentonamiento de la antigua Batasuna dependerá también de los términos en los que Estrasburgo dicte la sentencia.