Urkullu anticipa un ejercicio presupuestario «duro y doloroso»

Urkullu ha presentado personalmente las nuevas cuentas de su Ejecutivo dada la “grave situación” de la economía vasca, que según ha reconocido el consejero de Hacienda, Ricardo Gatzagaetxebarria, se halla en una “profunda recesión” , con caída en abrupto de la actividad económica y, por tanto, de los ingresos, y la destrucción desenfrenada de empleo, por encima ahora de la media española, con una tasa de empleo rondando el 13 por ciento.

“No voy a engañar, ni mentir, ni ocultar la verdad a la sociedad vasca”, ha asegurado el lendakari en un tono de marcada seriedad, pese a lo cual ha lanzado un mensaje de esperanza: “no estamos ante un callejón sin salida”.

El anteproyecto de presupuestos será remitido al Parlamento Vasco el próximo jueves, cuando se iniciará la negociación con el resto de grupos parlamentarios. Tanto PSE como EH Bildu, las dos únicas formaciones con las que el PNV sumaría mayoría necesaria en la Cámara de Vitoria, han dicho en las últimas horas que no descartan una enmienda a la totalidad, por lo que el acuerdo se encuentra cuesta arriba.

Urkullu ha apelado al “realismo” ante la oposición para aprobar unas cuentas “sociales que no tienen alternativa” y que destinarán el 73,9 por ciento de gasto al objetivo social. Ha asegurado cumplir con su compromiso electoral de no traspasar las “líneas rojas” en sanidad, educación y ayudas sociales, pese a que todos los Departamentos del Ejecutivo arrastran recortes. En concreto, la cartera de Salud se verá reducida en un 4,2 por ciento, donde el sistema público sanitario Osakidetza soportará según Urkullu “un ajuste mínimo” del 1,7 por ciento. Las asignaciones a Educación bajan un 7 por ciento, según se ha anunciado, si bien la partida completa, a la que se suman Cultura y Política Lingüística, se reduce un 10,1 por ciento.

A la pregunta de un periodista sobre la inversión en “Acción Exterior” (la red de seis embajadas que el País Vasco mantiene en el mundo), no han querido ofrecer ningún dato hasta su publicación oficial este jueves en el Parlamento. La asignación a Presidencia (Lehendakaritza) se ve resentida con un 36,6 por ciento, el recorte más severo de todos los departamentos.