Pintadas etarras imborrables en Navarra

Especialmente llamativo resultaba la rotonda de entrada a Echarri Aranaz, puesto que apenas a 3 metros de donde se encontraba el mural que homenajeaba a tres terroristas fallecidos permanecía visible el rostro de otro etarra, Bautista Barandalla, sin que los encargados de limpiar las pintadas lo tocaran y sin que los agentes de la Policía Foral que vigilaban las tareas de limpieza hicieran nada por tapar también el rostro de Barandalla.

El Ayuntamiento de Echarri Aranaz, gobernado por Bildu, ha achacado siempre que no limpiaba las pintadas porque se encontraban en fachadas privadas, a pesar de que los tribunales han insistido una y otra vez que le corresponde al Consistorio eliminar los homenajes a ETA. Efectivamente, hay un Gora ETA en la fachada de un edificio y una pintada enorme con las letras de la organización.

Sin embargo, en el quiosco de la calle mayor de la localidad, que pertenece al Ayuntamiento es un auténtico homenaje a los terroristas. En los árboles de alrededor se encuentran las fotos de distintos etarras.

En un lateral del quiosco numerosos terroristas aparecen dibujados bajo un cartel donde se pide el regreso a casa de los presos y de los huidos, así como la puesta en libertad de los enfermos. El interior del quiosco ha sido rodeado con una valla y la figura de dos personas representan a un preso y una mujer que ha sufrido torturas sentada en una silla.

Tampoco Arbizu se libra de pintadas que animan a los terroristas. Dos de las fachadas de una casa se encuentran cubiertas por inscripciones que se preguntan dónde está Jon, refiriéndose al etarra Jon Anza cuya desaparición casi un año fue utilizada por la banda terrorista, a pesar de que su cuerpo había sido localizado muerto por causas naturales en Francia.

A pesar de la gran cantidad de homenajes a los terroristas que todavía hay en las calles de estas localidades, y de otras muchas, el Gobierno foral se limitó a cumplir en la madrugada del pasado viernes, el requerimiento que le remitió la Delegación del Gobierno en Navarra. Tanto el Gobierno central como el de Navarra tienen la misma potestad para denunciar la aparición de pintadas que ensalcen a la banda terrorista, ya que existe una ley nacional y otra foral que castiga esta práctica. La Guardia Civil y la Policía foral pueden realizar por igual los informes en los que se denuncian estos homenajes.

Hasta el momento, tan sólo la Delegación del Gobierno que dirige Carmen Alba se ha decidido a poner fin a las pintadas y carteles, así como al incumplimiento de la ley de símbolos en los balcones municipales, enviando requerimientos a los Ayuntamientos. Otros tres municipios tienen que limpiar pintadas pro etarras en Navarra.