Responsabilidad social de impacto real, en el día a día y sobre el terreno

Este proyecto permitirá a cerca de 350 personas en situación de vulnerabilidad aprender cada año oficios como el de pescadero, panadero, cocinero o charcutero, entre otros. El objetivo no es otro que facilitar su ingreso al mercado laboral y dotarles de las herramientas necesarias para su inserción social. Del mismo modo, el Mercado Escuela de San Cristóbal aspira a ser un importante núcleo de vida social dentro de este humilde pero histórico barrio madrileño diseñado por el arquitecto Secundino Zuazo.

Para hacer de esta idea una realidad, Pablo Llano, director general de CESAL, reconoce que sin el apoyo de Ferrovial habría sido imposible llevar a buen puerto esta iniciativa. «Que una empresa como Ferrovial se haya comprometido con el proyecto de este modo, ha sido fundamental para poder arrancarlo», ha asegurado Llano.

La multinacional española, referente en la construcción y operación de infraestructuras sostenibles, ha apoyado a la ONG en la rehabilitación, modernización y acondicionamiento de la antigua galería comercial de San Cristóbal.

Esta transformación del mercado y su futura actividad, tienen un enfoque de sostenibilidad y eficiencia energética alineada con la estrategia de CESAL. De este modo, el espacio contará con paneles solares, sistemas de iluminación eficientes y refrigeración sostenible. La remodelación no sólo tendrá muy en cuenta la eficiencia energética, sino también la gestión de recursos bajo un modelo de economía circular.

Llano ha explicado que el mercado tiene una política de desperdicio cero que contempla el reparto de alimentos a familias vulnerables, incluyendo a la de los propios estudiantes.

Del mismo modo, la compañía ha prestado apoyo a la Fundación Altius en el acondicionamiento de locales para distribuir alimentos a más de 13.200 personas en situación de extrema vulnerabilidad. La entidad, coordinada con servicios sociales, da apoyo a familias con pocos recursos o personas en situación de desempleo de Valencia, Barcelona o Madrid. La ayuda de Ferrovial ha permitido a la Fundación Altius instalar cocinas profesionales para entregar menús elaborados a estas familias.

A raíz de la iniciativa de Ferrovial, la fundación ha transformado su servicio de asistencia en un modelo más humano de reparto de alimentos básicos que se adapta a las necesidades de cada familia. Asímismo, ha aportado equipamiento para facilitar la actividad de los voluntarios y para mejorar la conservación de los alimentos para conseguir una óptima gestión de los productos.

Otro ejemplo de la acción social que Ferrovial desarrolla en España es la ayuda que ha proporcionado a Cáritas para mejorar las prestaciones de tres de sus comedores sociales en las ciudades de Bilbao, Las Palmas de Gran Canarias y Tortosa.

La reforma de instalaciones, redistribución de espacios, renovación de electricidad y fontanería, ventilación, climatización o la protección contra incendios son algunas de las intervenciones que la compañía ha impulsado para facilitar la operatividad de las instalaciones.

Ferrovial, como parte de su estrategia de infraestructuras sostenibles, a través de sus programas de Acción Social en España, optimiza infraestructuras básicas como parte de su compromiso para mejorar la vida de las comunidades en las que opera. Desde 2012 ha ayudado a mejorar la vida de más de 80.000 personas en España.