Salarios reales positivos
Feijóo va a contar con el viento de cola en lo económico y puede que en lo político. En cualquier caso, de saque todo apunta a que la oposición esté a otra cosa lo que debería permitir que encare el inicio de la legislatura con mucho ímpetu
Principio de un (super)ciclo
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Iniciar sesiónDespués de dos años consecutivos de caídas continuas, el salario real vuelve en mayo a ser positivo. Las subidas pactadas en los convenios colectivos están por encima de la inflación del mes pasado. Y más importante aún, esta tendencia va a acelerarse los próximos ... meses.
La vuelta a salarios reales positivos debería ayudar a que la confianza del consumidor continuara recuperándose tras haber tocado mínimo histórico en octubre del año pasado. Paradójicamente, ese desplome de la confianza no se tradujo como siempre lo había hecho en una caída del consumo y la inversión. De esto hemos hablado largo muchas veces en esta página. Tiene que ver con el ahorro acumulado y, sobre todo, con las ganas de recuperar el tiempo perdido tras el horror del Covid.
Ahora, con los salarios reales levantando cabeza, el empleo con el viento de cola y tasas de ahorro todavía altas para patrones históricos, probablemente la economía coja algo más de tracción. Además, si a lo anterior sumamos un más que probable cambio de gobierno -Michavila es mi pastor, nada me falta- que redunde en una clara mejora de la percepción que sin duda en si misma es positiva, podemos concluir que lo peor lo hemos dejado por detrás.
Y aunque sé que los optimistas no estamos de moda, nunca lo hemos estado pero probablemente hoy menos que nunca, permitanme que insista en que tenemos por delante unos cuantos años buenos, muy buenos. Podrían ser excepcionales si el gobierno entrante está a la altura por lo menos de mis expectativas -que reconozco que son muy altas- y no desaproveha la ocasión para acometer reformas que se llevan dando patada a seguir mucho tiempo. Los problemas económicos españoles están más que sobrediagnosticados. Sus remedios también.
Feijóo va a contar con el viento de cola en lo económico y puede que en lo político. En cualquier caso, de saque todo apunta a que la oposición esté a otra cosa lo que debería permitir que encare el inicio de la legislatura con mucho ímpetu, cogiendo el toro por los cuernos, derogando primero lo mucho que hay que derogar e impulsando, segundo, algunas reformas que esbocen por donde va a ir su política económica. También creo que Hernandez de Cos podría ser la persona indicada para liderar esta tarea. Hay otros con capacidades parecidas pero pocos han demostrado estar a la altura de sus responsabilidades como ha estado el Gobernador del Banco de España estos últimos años.
Y si impera la cordura en el partido socialista, puede -y aquí sin duda puedo estar confundiendo la realidad con mis deseos- que el PSOE que termine surgiendo de las cenizas que va a dejar Sánchez tenga una actitud distinta en lo que respecta a los pactos de estado en las grandes materias en las que todos estos años no ha hecho posible un acuerdo. Pero eso ya lo veremos. Entretanto, Feijóo y su equipo económico tienen por delante una gran responsabilidad de la que deberían estar a la altura.
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