patty chang-chien, Vicepresidenta de Boeing Research & Technology

«Boeing busca potenciar desde Madrid tecnologías en vuelos no tripulados»

La compañía aeronáutica estadounidense explora también nuevos avances en ingeniería digital

Nace la Alianza para la Sostenibilidad del Transporte Aéreo

Patty Chang-Chien, en un momento de la entrevista con ABC ERNESTO AGUDO

La aeronáutica estadounidense Boeing tiene en Madrid la sede central de su gran 'laboratorio' europeo para Investigación y Tecnología. Además, fue el primer centro de estas características que Boeing estableció fuera de Estados Unidos, en el año 2002. Unos 70 empleados tienen la misión ... de buscar soluciones tecnológicas para la gestión de datos y desarrollo de servicios que mejoren la eficiencia operativa de aerolíneas y soluciones para la integración de sistemas aéreos no tripulados en el espacio aéreo no segregado.

He aquí dos desafíos de la aviación del futuro en los que ya trabaja Patty Chang-Chien, vicepresidenta y 'general manager' de Boeing Research and Technology, americana de origen taiwanés y formada en la rama de la ingeniería electrónica. Recientemente visitó el centro tecnológico español y participó en un acto organizado por la asociación 'Ellas Vuelan Alto', en la Universidad Politécnica de Madrid, encaminado a fomentar la pasión por la aeronáutica entre las alumnas.

En conversación con ABC, la ejecutiva del gigante aeronáutico esboza sus cuatro pilares clave en tecnología : «La producción avanzada que garantice la seguridad y calidad de nuestros productos; la ingeniería basada en modelos digitales (el conocido como 'Model-Based Engineering', MBE); la aviación autónoma; y la sostenibilidad medioambiental».

El primer pilar impacta sobre la producción en todas sus fases, tanto comercial y militar. «En este campo, la inversión en robótica y automatización de nuestras factorías es vital», explica Chang-Chien. Este aspecto lleva a la necesidad de seguir avanzando en la digitalización del proceso de producción con el análisis de datos también. Así, la ingeniería digital (MBE) aplicada a la aeronáutica es considerada por la ejecutiva de Boeing como clave en términos de búsqueda de las mejores soluciones y ahorro de costes en el proceso de diseño y construcción de los aviones.

Sobre el tercer pilar, la autonomía, es una de las tecnologías en las que Boeing está poniendo más empeño con el objetivo de poner en el mercado una aeronave de movilidad urbana que no necesite piloto: «Creemos en la autonomía. Llevará un tiempo llegar a ella, como también sucede en la industria de la automoción, pero la autonomía es el futuro, sin duda. Hemos pasado décadas desarrollando capacidades aeroespaciales autónomas que ahora están emergiendo. Es el caso de Wisk: nuestro taxi aéreo de sexta generación, el primero que transporta pasajeros candidato para la certificación de la Administración Federal de Aviación de EE.UU. Se trata de un modelo de helicóptero eléctrico de despegue y aterrizaje vertical diseñado para la movilidad urbana», afirma Chang-Chien

Además Boeing tiene un proyecto bajo el paraguas de la Iniciativa Civil de UAVs en Galicia: «Esperamos consolidar y mantener este esfuerzo a través de iniciativas adicionales. Buscamos potenciar desde el centro de Madrid estas tecnologías en aviación no tripulada».

Ya por último, desde Boeing se trabaja para acelerar las investigaciones relativas al combustible de aviación sostenible (SAF, en las siglas inglesas de 'Sustainable Aviation Fuel'). «La sostenibilidad es clave. Las cuatro vías estratégicas de Boeing para reducir las emisiones son la renovación de la flota, la eficiencia operativa, las energías renovables y las tecnologías avanzadas. Sin duda el SAF nos llevará muy lejos», insiste Chang-Chien. En este sentido, el hidrógeno parece ser solución más factible que la electricidad.

Sobre el problema de la cadena de suministros que afronta la industria en general desde Boeing se trabaja «codo con codo» con las empresas proveedoras para tratar de resolver los problemas que se presenten: «Todos estamos lidiando con esta problemática. En casi todos los sectores. Desde Boeing tratamos de seguir el proceso de cerca y también enviamos a nuestros ingenieros para ayudar a nuestros proveedores a resolver sus problemas si es necesario», explica la ejecutiva que se unió a Boeing en 2019 procedente de Northrop Grumman Aerospace Systems –especializada en sistemas aeronáuticos de Defensa – donde sirvió como directora de Tecnología y Electrónica.

Modelo afianzado

La vicepresidenta de Boeing defiende que la crisis de 737 MAX está ya superada con un modelo ya afianzado: «Más de 50 aerolíneas están operando más de 900 aviones MAX con más de 3.500 vuelos de ingresos diarios. Registramos más de 800 pedidos netos en 2022, impulsados por la fuerte demanda precisamente del 737 MAX».

¿Y la guerra en Ucrania? ¿Cómo está influyendo en el negocio aeronáutico de Boeing? «Cerramos el centro de diseño que teníamos en Moscú. La seguridad de nuestros empleados en Ucrania es en estos momentos nuestra prioridad absoluta».

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