Siemens chequea su salud en Bolsa

La división de tecnología sanitaria Siemens tuvo en el ejercicio 2015/2016 un beneficio operativo de 2.128 millones, un 7 % más, y el sector cuenta de fondo con el gran filón que supone el envejecimiento de la población occidental . «La tecnología sanitaria es un negocio altamente atractivo en el que queremos expandir nuestra posición de liderazgo», ha sido la explicación de Joe Kaeser, presidente y CEO de Siemens, «con este paso continuamos implementando nuestra estrategia Vsion 2020, ganando flexibilidad y capacidad».

El paso se enmarca en la estrategia de Siemens para recuperar su propia salud. En poco más de un año ha fusionado su división de renovables con la española Gamesa y ha anunciado la integración de su filial ferroviaria con la francesa Alstom. En octubre, vendió el 17,3% que le quedaba en la empresa de iluminación Osram, que segregó y sacó a Bolsa en 2013, por más de 1.200 millones. En Energía y Gas, la mayor división de Siemens por ingresos, acaba de anunciar un recorte de 6.900 empleos, la mitad en Alemania. Ahora, con este listing para el que ha contratado a Goldman Sachs, Deutsche Bank y JP Morgan, una operación en la que BNP, Merrill Lynch, Citigroup y UBS serán los bancos sindicados, se sitúa como «socio de confianza de los proveedores sanitarios a nivel mundial», según el CEO Bernd Montag.

Previamente, la división con sede en Erlangen, ha completado la adquisición de Epocal Inc., una subsidiaria de Alere Inc. (Waltham, MA, EUA) que desarrolla y proporciona sistemas de diagnóstico de sangre para empresas de atención médica. Con eso, además de su liderazgo en fabricación de equipos de rayos x y resonancias, ha completado una cartera integral de productos y servicios de diagnóstico e imagenología terapéutica, diagnóstico de laboratorio y medicina molecular.

El hecho de que Siemens haya optado por la bolsa de Frankfurt, en lugar de Nueva York, es signo de que Alemania pretende alzarse a la cabeza de un sector en que el valor de las fusiones y adquisiciones fue de 1,3 billones entre 2014 y 2016 y que aporta uno de cada cinco euros invertidos en I+D. En Alemania genera 300 billones de euros al año.

La salud es clave también en la estrategia de internacionalización de la economía española. En 2016, España exportó medicamentos por 10.300 millones de euros y tecnología sanitaria por 2.400 millones. El 70% a Europa, pero en creciente medida a países asiáticos como Vietnam, inmersos en el crecimiento global de gasto en el sector. Según Health Care de Deloitte, el gasto en sanidad experimenta un crecimiento global medio del 4,3% entre 2015 y 2019. En este contexto, Siemens se dispone a «moldear el desarrollo del sector sanitario a nivel global». «Ayudaremos a nuestros clientes a que su participación sea exitosa en las tendencias actuales del sector», dice Montag, «como la consolidación, el desarrollo industrial y la gestión integral de la salud con la excelencia clínica, flujos de trabajo eficientes y valor añadido a nivel financiero», para lo que necesita hacer frente a feroces competidores más pequeños pero con tecnología específica que también pelean por dar forma a uno de los grandes sectores del siglo XXI.

El fabricante de aerogeneradores Siemens Gamesa, resultado de la fusión de Gamesa y de la división eólica de Siemens, presentará su nuevo plan de negocio a los inversores el próximo 15 de febrero. La fecha de presentación ha sido acordada por el consejo de administración de la compañía, que también ha formulado las cuentas del último ejercicio -que se cerró el 30 de septiembre-, el informe de gestión y la propuesta de aplicación del resultado. Gamesa anunció el pasado 6 de noviembre un plan de reestructuración que afectará a un máximo de 6.000 empleados en 24 países. La empresa registró unas pérdidas de 135 millones de euros en el segundo semestre de su año fiscal (entre abril y septiembre), el primero de actividad conjunta tras su integración.