Seat montará 12 concesionarios en China el año que viene para vender León e Ibiza

Seat (o Xiyate, en mandarín, lo que suena de manera similar y podría traducirse como «estándar especial de España»), ya presentó su marca por primera vez en China en abril pasado, en el Salón del Automóvil de Shanghái (este), la principal cita del motor en el mercado chino, y ahora en Cantón reveló sus primeros objetivos.

La compañía abrirá 15 concesionarios en las principales ciudades del país, incluidas Shanghái, Pekín, Cantón, Xian y Xiamen, entre otras, para extenderse más adelante hacia más grandes urbes del interior, y espera vender unos 3.500 ó 4.000 coches en China ya en 2012, según su presidente ejecutivo, el británico James Muir.

«En China el mercado es enorme, y aquí tenemos un potencial de desarrollo real», explicó a Efe el vicepresidente ejecutivo para ventas y mercadotecnia de Seat, el francés Paul Sévin, que ve en su entrada al mercado oriental un reflejo del impulso renovado que espera tomar la marca en 2012.

El año próximo Seat lanzará cuatro nuevos modelos y tratará de impulsar las exportaciones de sus vehículos fabricados en Martorell (Barcelona) sobre todo hacia China, Rusia y México.

En el país norteamericano, tras una década en el mercado, Seat espera alcanzar unas 19.000 unidades vendidas en 2011, lo que supondrá un aumento de un 25,80 por ciento interanual, aseguró a Efe su director para el mercado exterior, el francés Éric Le Gendre.

En China, a los modelos León e Ibiza, que ya se presentaron en Shanghái y ahora de nuevo en Cantón, se podría sumar hacia 2013 la caravana Alhambra, adelantó Muir, mientras, por primera vez en una feria, el salón cantonés reúne también juntos a sus prototipos IBl (berlina), IBx (todoterreno) y deportivo coupé IBe.

«Hoy es un día muy simbólico», destacó Sévin: «Coincidiendo con las elecciones, estamos lanzando un nuevo modelo en España (el utilitario Mii), presentamos nuevos coches en China y ponemos la primera piedra de un concesionario» en el distrito cantonés de Baiyun.

Ese local, con 100 metros cuadrados de exposición, será uno de los primeros en ser inaugurados en los próximos meses, anunció Chen Hui, presidente de la inversora cantonesa de concesionarios Guandong Hongyue. De hecho, Seat también planea hacer en unos meses en China, como gesto al mercado asiático, el estreno mundial de un nuevo tipo de concesionarios que supongan toda una «experiencia» para los potenciales clientes, destacó a Efe el responsable del «proyecto China» de la marca española, Ferrán Jover.

Los nuevos concesionarios, primero en China y más adelante en otros países, darán una "nueva imagen más cercana para el cliente", que inundará al visitante con sus "cinco sentidos", para que "tenga la experiencia de que cuando entre en un concesionario Seat note que es algo distinto, desde luego nuevo y único en China", dijo.

Todos estos pasos "muestran el verdadero desarrollo de Seat", cuyo objetivo final es impulsar las exportaciones y aumentar la producción de su fábrica española de Martorell, subrayó Sévin.

Para entrar en China Seat se posicionará presentando sus gamas más altas (Cupra y FR) para, una vez establecida la marca, intentar ocupar también parte del mercado en gamas más bajas, aunque en precio, al ser vehículos importados, no podrán competir con los fabricantes locales, admitió por su parte Muir.

Por ello se presenta en el país asiático como una marca europea, parte del grupo Volkswagen, y muy volcada en el diseño, o en palabras de vicepresidente ejecutivo del conglomerado alemán en China, Soh Weiming, "una combinación perfecta de tecnología y arte".

Así, concluyó Soh, espera entrar en el principal mercado de flotación para las marcas mundiales tras los apuros de la crisis mundial de la mano de los jóvenes chinos "nacidos en los ochenta, que aprecian el arte y el diseño, tienen gran confianza en sí mismos y les gusta salirse del rebaño y disfrutar de la vida al máximo".