Ordóñez: «Fue un error echar a Rato»
El ex gobernador defiende su gestión al frente del Banco de España y rechaza explicar su responsabilidad en la crisis bancaria si no comparece también su antecesor, Jaime Caruana
MONCHO VELOSO
Miguel Ángel Fernández Ordóñez había sido llamado a comparecer este martes en el Congreso de los Diputados para explicar su gestión de la crisis del sistema financiero español y en concreto del "caso Bankia". Pero el ex gobernador del Banco de España ha despejado todos ... los balones, culpabilizando de cualquier posible error a los gobiernos de Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, sobre todo al de este último. Ha llegado a acusar al Ejecutivo popular de hundir en seis meses la confianza en el país y ha asegurado que el plan de saneamiento de Bankia que su equipo preparaba hubiera salvado a la entidad .
«Nosotros nunca estuvimos a favor de cesar a Rodrigo Rato, porque es una personalidad importante en el contexto internacional», ha dicho criticando la decisión del ministro de Economía, Luis de Guindos, de forzar la salida del ex presidente. Al respecto, Ordóñez ha explicado que su intención era retirar las funciones ejecutivas a Rato, de forma que se quedase como una suerte de representante diplomático de la entidad y que José Ignacio Goirigolzarri, actual presidente de Bankia, entrase en la entidad como «número dos» pero con todo el control de la gestión.
Con estas palabras Ordóñez ha venido a hacer una crítica mayor: una supuesta intromisión del Gobierno popular en las tareas del supervisor. "Los gobiernos atendieron en lo fundamental los planteamientos del Banco de España hasta diciembre pasado" , ha espetado. Además, el ex gobernador ha dicho que la situación que atraviesa actualmente España es fruto del hundimiento de la confianza en el país en los seis primeros meses del año, insinuando que se debe a la gestión del Partido Popular, y ha avisado de que la prima de riesgo española está hoy solo por debajo de las de Grecia y Portugal, y en peor situación que Irlanda.
Balones fuera
Miguel Ángel Fernández Ordóñez entró por la puerta de atrás del Congreso de los Diputados para driblar las preguntas de los periodistas que le aguardaban a la entrada. Y ya en su comparecencia para explicar su gestión en la gestación y resolución de la crisis del sistema financiero español sorteó también cualquier "mea culpa". "Se lanzó una campaña en contra del Banco de España intentando descalificar absolutamente a la institución y sin aportar ningún fundamento", ha dicho el ex goberandor del Banco de España al inicio de su intervención ante la comisión de Economía de la Cámara, donde ha asegurado que su tarea de supervisión "ha cumplido bien su tarea en un periodo excepcional" .
Ordóñez no ha quitado razón a su sucesor, Luis María Linde, que hace una semana, también en el Congreso, lamentó que sus predecesores en el Banco de España actuasen «con poca decisión» ante la crisis financiera que se avecinaba. "Se puede decir con razón que también el Banco de España podía haber tomado algunas medidas macroprudenciales que no se adoptaron", ha admitido el también ex secretario de Estado de Hacienda bajo el Gobierno de Rodríguez Zapatero. Eso sí, Ordóñez ha rechazado detallar qué se debería haber hecho y no se hizo "sin dejar" a su antecesor "dar su punto de vista en estas comparecencias", en una clara exigencia a los diputados para que llamen también a declarar a Jaime Caruana .
"Años de alegría"
Precisamente buena parte de análisis de Ordóñez sobre cómo el mapa financiero español ha llegado a dónde está hoy se centra en lo que no se hizo durante el mandato de Caruana, entre los años 2000 y 2006. "El problema bancario español se engendró durante los años de expansión desmesurada", ha señalado el ex gobernador, quien ha dicho que esa etapa "de alegría" arrancó "a mediados de los años noventa y se desarrolló durante las dos legislaturas del PP y la primera del Partido Socialista".
El ex gobernador incluso ha celebrado que cuando estalló la crisis financiera internacional, en otoño de 2008, con la caída de Lehman Brothers, el impacto de esta en el sistema bancario del país "fue mínima gracias a la solidez de nuestra regulación y supervisión bancaria ". Así, Ordóñez ha explicado que cuando bancos y cajas sí empezaron a sufrir la crisis, como consecuencia de la recesión macroeconómica, "España no estaba preparada para gestionar esta crisis", alegando que no el supervisor no disponían de las herramientas necesarias para atajarla.
Al respecto, Ordóñez ha denunciado las dificultades de abordar las fusiones entre cajas "por intereses muy diversos" de sus directivos "como mantener el poder o aumentar las prejubilaciones" y las complejidad de llevar a cabo el proceso de reestructuración del mapa financiero bajo la orden del Gobierno socialista de usar el menor dinero público posible mientras otros países ya habían tapado los agujeros de sus bancos. "Se han hecho mal muchas cosas y sobre todo no se hicieron muchas cosas que ahora todos vemos claro que se deberían haber hecho", dijo Ordóñez aclarando eso sí que "la responsabilidad de su puesta en marcha corresponde al Gobierno y a los legisladores".
Pero el ex secretario de Estado de Economía, José Manuel Campa, que habló antes que Ordóñez, tampoco asumió ningún tipo de responsabilidad. «Seguramente se cometieron errores y excesos, pero la dirección de la reestructuración financiera era y es la correcta» , ha descrito. Será este jueves cuando dé su versión de los hechos la ex vicepresidenta y ministra de Economía, Elena Sagado. Ese mismo día comparecerán además los ex presidentes de Novacaixagalicia y CatalunyaCaixa, Julio Fernández Gayoso y Narcís Serra, y el ex presidente de BFA-Bankia, Rodrigo Rato.
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