Las hidráulicas, y no el gas como pregona el Gobierno, fijan los precios más caros de la electricidad

En él, se casa la energía ofertada por las compañías productoras con la oferta prevista para cada hora del día siguiente. El precio es determinado por la última tecnología que casa su oferta y que no solo es la más cara, sino que fija el precio para el resto de tecnologías, ya que es un mercado marginalista. Este modelo funciona igual en una veintena de países europeos.

La creencia general, también fomentada desde el Gobierno , de que es el gas el que fija los precios más caros de la electricidad queda desmentida con los datos de la propia OMIE, el gestor del mercado mayorista español, ya que son las centrales hidráulicas las que determinan la mayoría de los precios más caros de la electricidad.

Este periódico ha analizado hora a hora de cada día de marzo las tecnologías que han fijado el precio de la electricidad durante el mes de marzo, que fue el más caro de nuestra historia. La conclusión es que las centrales hidráulicas y las de bombeo fijaron los precios en el 82% de las horas más caras, frente al 5,3% de las plantas de ciclo combinado. Las renovables solo lo hicieron en el 9,6% y las de carbón en un 2%.

Las principañes compañías propietarias de centrales hidráulicas y de bombeo son Iberdrola (8.400 MW instalados), Endesa (3.900 MW), Naturgy (1.600 MW), Repsol (1.200 MW), Acciona (770 MW) y EDP (480 MW). Estas empresas están obteniendo jugosos ingresos con los denominados ‘costes de oportunidad’, un mecanismo totalmente legal utilizado en el mercado mayorista de electricidad.

En el sector se apunta que los costes de generación de esas plantas pueden ser de unos 30 euros el megavatio hora (MWh). En marzo, el precio medio de la electricidad fue de 283,30 euros el MWh.

Estas compañías se aprovechan de que el precio que ofertan las centrales de gas es alto e intuyen que es el resultado de multiplicar por dos el coste del gas en el mercado Mibgas, más un 0,5% de los costes de derechos de emisión. Así, conociendo el precio aproximado al que van a ofertar su electricidad las centrales de gas, aquellas empresas ofrecen un precio ligeramente inferior para llevarse la puja, lo que suelen hacer con sorprendente frecuencia.

La confirmación de que son las centrales hidráulicas y, en menor medida las de bombeo, las que determinan el precio de la mayor parte de las horas más caras se produce en un momento en el que Bruselas está analizando la propuesta realizada por los gobiernos de España y de Portugal para limitar el precio del gas que se utiliza para generar electricidad y evitar así que presione al alza el precio final en el mercado mayorista.

La propuesta conjunta establece un tope de 30 euros el MWh, que es el precio medio del gas antes de la escalada que inició el verano pasado y que alcanzó máximos históricos en marzo. No obstante, los expertos apuntan que es un precio demasiado bajo, ya que distorsionaría claramente los mercados eléctricos del resto de la Unión Europea que, no hay que olvidar, están interconectados. Lo más probable, según esas fuentes, es que la Comisión Europea eleve a 80 euros el MWh ese tope. Con ese coste, el precio de la electricidad se situaría un poco por encima de los 100 euros el MWh, menos de la mitad de lo que cuesta actualmente.