Guerra entre Cabify y empresas de VTC: «La aplicación me ha llegado a pedir 360.000 euros»

La relación de la tecnológica con estas flotas, con las que colabora para prestar sus servicios, se resintió con el estallido de la pandemia, pero no llegó a quebrarse hasta hace unos pocos meses. Varias firmas propietarias de autorizaciones explican a este periódico que la razón fundamental fue la entrada en vigor del nuevo régimen sancionador del sector, producida el pasado mes de octubre. En la práctica, este nuevo reglamento provocó que distintas administraciones de transportes, como la madrileña, inmovilizaran vehículos de VTC por aportar hojas de rutas rellenadas de forma incorrecta.

Según estas pequeñas flotas, Cabify rellena de forma incorrecta estas hojas de ruta, un documento que debe contener todas las características principales del viaje, como el punto de origen o los datos del cliente. «Como arrendadores no aparecemos nosotros, sino ellos. Y tampoco aportan el DNI de los clientes. Lo hacen así desde hace años, pero ahora este sistema nos ha costado sanciones», explican desde una de estas empresas.

El nuevo régimen contempla la retirada de la licencia si hay tres sanciones firmes en un periodo de dos años. Una circunstancia que llevó a varias empresas a pedir a Cabify que cambiase el método para redactar las hojas de ruta, pero la plataforma ni siquiera respondió a sus reclamaciones. En su lugar, la empresa contactó con la Comunidad de Madrid para solventar el problema, pero por el momento este no está cerrado del todo . Por si todo ello fuera poco, algunas empresas también denuncian que Cabify ha modificado las «condiciones de tarifa y penalizaciones» de forma unilateral.

Todo ello provocó que distintas flotas rompieran, de forma unilateral, la exclusividad que acordaron con la plataforma y empezaran a colaborar también con las otras aplicaciones del sector, Uber y Bolt. La respuesta de Cabify no se ha hecho esperar. La tecnológica ha envidado una serie de burofaxes a estas compañías en los que reclama que dejaran de colaborar con sus competidores . En caso contrario, avisan, se enfrentarán a cuantiosas penalizaciones.

«Le solicitamos que en el plazo máximo de 48 horas desde la recepción de la presente carta termine por completo cualquier relación comercial con otras plataformas», explica la compañía en un burofax al que ha tenido acceso este periódico. La empresa amenaza incluso con ejercer «las acciones judiciales que correspondan» y recuerda asimismo que la obligación de elaborar la hoja de ruta recae en los propietarios de licencias VTC. Además, asegura, en los citados burofaxes , que la información que facilita para elaborar las hojas ya está en consonancia con la Comunidad.

«Me han amenazado con sanciones por el incumplimiento del contrato y me han pedido más de 360.000 euros», explica el propietario de una de estas flotas. Según sus palabras, Cabify ha incumplido en repetidas ocasiones su acuerdo porque «cuenta con una filial de vehículos propios, Vector, a la que beneficia a la hora de repartir viajes». La tecnológica ha aplacado el motín de las pequeñas flotas con estas comunicaciones , y en las últimas semanas varias empresas han vuelto a colaborar con Cabify. Pero el daño parece irreparable en algunos casos, y la ‘app’ desconfía de que en el futuro no se vuelva a vulnerar la exclusividad que exigen a estas empresas.

Todo este enfrentamiento se ha visto agravado por la desconexión de Cibeles. En este caso, la filial de Auro rompió con Cabify por los cambios producidos en el control de la empresa, tras la salida de varios directivos, y el cambio unilateral de los porcentajes de facturación. Ambos conflictos han complicado el servicio de la ‘app’ en Madrid. Fuentes del sector aseguran que Cabify ha tenido que tirar de autorizaciones basadas en otras comunidades para hacer frente a la demanda, pese a que estos coches deben realizar el 80% de sus servicios en su región de origen.

«Cabify dispone de un canal de comunicación abierto con todas las empresas que colabora, y mantiene conversaciones con todas ellas. Los contratos entre Cabify y las empresas colaboradoras aportan valor añadido a las flotas gracias a diversas ventajas que ofrece Cabify. Entre otros, cabe destacar herramientas como el “fleet portal”, donde las empresas colaboradoras pueden seguir al momento toda la actividad de sus conductores e identificar puntos de mejora de sus flotas, así como modificar algunas cuestiones operativas», explica por su parte la tecnológica.