El caos regulatorio paraliza el mercado del alquiler

Las dudas hasta el punto de que ni siquiera está garantizado que la Diputación Permanent e convalide la nueva norma, que amplía la duración de los contratos y liga la subida de los alquileres al IPC. El Gobierno necesita los votos favorables de Podemos, ERC, PDECat, PNV y Bildu para sacar adelante la norma. Y estos dos últimos partidos todavía no han garantizado su apoyo. A ello se suma que el Partido Popular ha cuestionado la tramitación del decreto porque no existen condiciones de urgente necesidad, una condición indispensable si se quiere utilizar esta vía parlamentaria.

Así, si finalmente la Diputación Permanente tumba el decreto se volvería a la ley de 2013, puesta en marcha por el Partido Popular. Por ello, explican desde el sector, muchos propietarios están paralizando la firma de nuevos contratos , ya que la anterior legislación es más favorable para sus intereses. «Ahora mismo el mercado del alquiler es un caos. Ni propietarios ni inquilinos están al tanto de la regulación a la que se tienen que someter. Se está produciendo ya un importante parón y los contratos que se firman empiezan a tener un precio superior al registrado estos meses», explican fuentes del sector.

Los expertos del ladrillo comparan esta situación con la congelación de los alquileres que se impulsó durante el franquismo , lo que en la práctica redujo ostensiblemente el mercado y empujó a muchos inquilinos a comprar una vivienda. «La diferencia es que ahora no se está agilizando la construcción ni se están impulsando las viviendas de protección oficial», puntualizan estas mismas fuentes. Esta falta de oferta ha sido señalada en varias ocasiones por los expertos del sector como una de las causas que explican el alza de los precios del alquiler en ciudades como Madrid y Barcelona.

La directora de estudios de Fotocasa, Beatriz Toribio, reconoce que «existe un problema en el mercado del alquiler», pero considera que la situación «no se soluciona con una sola norma». En su opinión, «la reforma del mercado debería llevarse a cabo a través de una reforma completa que cuente con el apoyo de una mayoría parlamentaria amplia y, sobre todo, con el beneplácito del sector inmobiliario».

En esta ocasión, sin embargo, se ha cuestionado incluso la posición de determinados ministros respecto al decreto. Las fuentes antes citadas aseguran que en conversaciones informales, representantes de distintos Ministerios también muestran sus recelos sobre la forma en la que se está aprobando el decreto. «Es una apuesta personal del ministro de Fomento para resarcirse del fracaso del anterior decreto en materia de vivienda», señalan, refiriéndose a la iniciativa que tumbó en enero el Congreso de los Diputados.

Durante la elaboración de esta norma anterior, producida a finales de año, el Gobierno ya mostró distintos puntos de vista respecto a las políticas de vivienda que debía adoptar el Ejecutivo. De hecho, la ministra de Economía, Nadia Calviño, frenó la regulación de precios que iba a incluir inicialmente el decreto. Esto provocó que Podemos finalmente no apoyara la norma.