Según este indicador del INE, el precio medio global del mercado inmobiliario aragonés -viviendas nuevas y de segunda mano- se incrementó el año pasado un 6,2%, cuatro décimas por debajo de la media nacional. A tenor de este informe, Aragón fue una de las regiones en las que más se encareció la compraventa de viviendas, solo por detrás de Madrid (+9,6%), Cataluña (+8,1%) y Baleares (+6,4%).
En cómputo nacional, comprar una vivienda nueva sale ahora un 8% más caro que hace un año. En Aragón el repunte ha sido ligeramente inferior que la media nacional, de un 7,5% exactamente.
En cuanto a la vivienda de segunda mano, el encarecimiento medio en el conjunto de España ha sido del 6,4%, mientras que en Aragón ha alcanzado el 6,4%.
En el caso de Aragón hay que tener en cuenta las grandes disparidades que se dan entre el mercado inmobiliario de Zaragoza capital y el del resto de municipios, en una región dominada por una gran cantidad de pequeñas localidades. El dinamismo del mercado inmobiliario se concentra principalmente en la capital aragonesa.
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