Calviño tilda de «errata» la propuesta a Bruselas de suprimir la declaración conjunta en el IRPF

«El texto da lugar o puede dar lugar a una mala interpretación pero la ficha relativa al componente 29 es claro y meridiano», ha sostenido. En este sentido, la vicepresidenta ha recalcado que muchas de las medidas que deberán evaluar el grupo de expertos de la reforma tributaria, entre ellas las recomendaciones de la Autoridad Fiscal (Airef), se enmarcan en una «agenda global» liderada por Estados Unidos, en temas como la «imposición mínima de Sociedades» dentro de la OCDE o la fiscalidad verde. La reforma fiscal, en sus palabras, se reservará a 2022.

El Gobierno incluyó en uno de los documentos la eliminación progresiva de la declaración conjunta , que en la actualidad beneficia a 4,2 millones de personas. «Se incluye la paulatina desaparición de la reducción por tributación conjunta mediante el establecimiento de un régimen transitorio, debido a que genera un desincentivo a la participación laboral del segundo perceptor de renta (principalmente mujeres)», recogía. Posteriormente, el Ejecutivo reculó y señaló que no se había propuesto a Bruselas, dentro del documento íntegro de 2.000 páginas, esta medida. Las 2.000 páginas del plan íntegro serán publicadas a lo largo del día.

Por el momento, Calviño ha anunciado que aspira a que este año lleguen de la UE los 27.000 millones de euros remitidos en los Presupuestos Generales del Estado para 2021, para acelerar las inversiones. La vicepresidenta ha apuntado que en junio, con la aprobación del plan, se realizará una primera entrega de 9.000 millones de euros, a los que se sumarán, de forma semestral, las cantidades restantes en base al cumplimiento de una serie de hito s. Por tanto, el Gobierno aspira a que en la segunda mitad del año se sumen otros 18.000 millones de euros.

El propio plan fija el calendario para ir aprobando 212 medidas, 110 inversiones y 102 reformas que se quieren acelerar para que salgan en la primera fase del periodo, de 2021 a 2023, cuando se movilizará el grueso de los recursos.

Junto a ello, el Ejecutivo también comenzará a pedir los préstamos correspondientes para tejer un mecanismo permanente de protección de empleo, unos ERTE específicos de formación y reciclaje que exigirán recursos que se espere comiencen a llegar en 2022 y se alarguen en los próximos ejercicios.