Argentina llega a un acuerdo con sus acreedores y pagará más de 7.000 millones de euros
El ministro de Finanzas, Axel Kicillof, niega que el acuerdo con el Club de París no implican condicionamiento para la política económica
Argentina llega a un acuerdo con sus acreedores y pagará más de 7.000 millones de euros
Trece años más tarde, el Gobierno de Argentina logró, de madrugada, alcanzar un acuerdo con el Club de París para saldar su deuda de 9.700 millones de dólares. Los pagos se harán en cómodos plazos durante cinco años con una tasa de interés del ... 3 por ciento. El ministro de Economía, Axel Kicillof , declaró que el compromiso «respeta» los «principios que nos permitieron crecer el 6 por ciento anual en los últimos diez años».
El Club de París difundió un comunicado donde celebra el acuerdo con «un esquema que ofrece una solución sostenible y definitiva a los atrasos de la deuda de Argentina». El primer pago está previsto para mayo de 2015 por una suma de 1.150 millones y el siguiente, al año próximo el mismo mes, cuando en la Casa Rosada ya no estará la actual presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
El jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, aseguró por la mañana que los tiempos de pago pueden ser revisados. Si bien el comunicado y las declaraciones de Kicillof no dejan espacio para la duda, se desconocen los detalles de los desembolsos. Es decir, si estos se pagaran –como con Repsol tras la expropiación del Ypf- en bonos del Estado o será en efectivo o mediante una fórmula mixta.
La sesión, de más de 16 horas, se celebró en una de las plantas del Ministerio de Economía francés donde se reunieron los delgados de los países miembros, entre ellos España que con Alemania, Austria, Australia, Bélgica, Canadá, Dinamarca, Finlandia, Francia, Irlanda, Estados Unidos, Italia, Japón, Holanda, Reino Unido, Países Bajos, Suecia y Suiza, forman parte de este foro cuya decisión deberá ser aprobada por los Gobiernos acreedores.
El comunicado celebra «el progreso realizado por Argentina hacia la normalización de sus relaciones con los creedores y la comunidad internacional». En Argentina la noticia se recibió como un balón de oxigeno que le despeja el camino para volver a los mercados de capitales internacionales.
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