Pescanova se plantea presentar un plan alternativo de viabilidad con la banca acreedora

Las mismas fuentes han explicado que esta posible alternativa, que está siendo analizada por los bancos y la administración concursal, parte de los consejeros independientes del máximo órgano de dirección de la firma para evitar llegar a la liquidación, si bien el tiempo corre en contra de la pesquera, ya que esta propuesta, una vez presentada al juez encargado del concurso, deberá contar con el respaldo del 51% de los acreedores antes del próximo día 30.

Otras fuentes consultadas creen que esta propuesta es una "maniobra a la desesperada" del propio consorcio, teniendo en cuenta que procede del propio consejo de administración y que se pone encima de la mesa ante la posibilidad de que el plan de la cervecera catalana no logre el respaldo de los acreedores. Junto a esta posibilidad, está la alternativa de que la banca acreedora aguarde a la liquidación de la multinacional pesquera.

El Juzgado de lo Mercantil número 1 de Pontevedra dictó el lunes de Semana Santa una providencia en la que acordó hasta el 29 de abril el plazo para adherirse al convenio de acreedores de la pesquera con el fin de que las partes pudieran alcanzar un acuerdo para la viabilidad de la compañía. El magistrado advirtió de que el plazo se amplía "en exclusiva atención a facilitar a los acreedores la posibilidad de decidir y emitir su voto sobre la única propuesta de convenio admitida a trámite".

A ese respecto, el titular de la sala mercantil número 1 de Pontevedra subrayó que precisamente el hecho de que solo se haya admitido a trámite una propuesta supone la "terminante invariabilidad de ésta". El juez Roberto de la Cruz admitió a trámite el 20 de marzo la propuesta de convenio de la cervecera Damm y del fondo Luxempart, pero desde entonces no se ha podido alcanzar ningún acuerdo con la banca atrapada.

Las divergencias entre las partes derivan de que el acuerdo suponía recuperar 1.000 millones de deuda , pero la propuesta finalmente registrada reduce esta cuantía hasta los 700 millones de euros. Ante la eventualidad de no alcanzar un acuerdo, la banca atrapada tiene preparado un plan de rescate, ya presentado ante los administradores, para cuando la multinacional pesquera vaya a subasta. La propuesta de la banca acreedora para reflotar la compañía incluye una inyección de capital de 115 millones de euros y la capitalización de unos 2.000 millones de euros de deuda, lo que supondría una quita inferior al 70%.