Campeones que nadie esperaba

El tenis amplía su nómina de ganadores en los torneos 1.000; Borna Coric y Caroline Garcia, últimos ejemplos de reválida

Del número 1 a las dudas: a vueltas con la derrota de Nadal ante Coric

Caroline Garcia AFP

22/08/2022
Actualizado a las 20:31h.

Después de casi más de una década de la tiranía ejercida por Rafael Nadal (36), Novak Djokovic (38) y Roger Federer (28) en los torneos de categoría 1.000, el tenis amplía su nómina de campeones. Con el español, el serbio y el suizo en ... pleno esplendor, las opciones del resto se reducían casi a la nada; con ellos más pendientes de los Grand Slams y de su salud, el circuito masculino se frota las manos porque hay opciones para todos. Se ha abierto la esperanza y se tira de ilusión, actitudes que a veces pueden más que el ranking.

Este pasado domingo, Borna Coric se coronó en Cincinnati, campeón con el ranking más bajo de la historia, 152 del mundo. El croata, 25 años, es el sexto campeón de un Masters 1.000 en los siete torneos que se han disputado hasta la fecha. Es el cuarto que estrena casillero de este calibre (el séptimo en 15 torneos); no pasaba desde 2003. Sucede a Taylor Fritz (Indian Wells), Carlos Alcaraz (Miami y Madrid) y Pablo Carreño (Canadá). Los otros dos fueron para Stefanos Tsitsipas (Montecarlo) y Djokovic (Roma). Solo el murciano ha sido capaz de repetir.

Es una situación que comienza a sentirse entre los chicos, pero que ya ocurre desde hace un tiempo entre las chicas. Después de la soberanía que ejercía Serena Williams hasta 2017, ha habido 14 campeonas en 21 Grand Slams. Solo Naomi Osaka ha logrado cuatro, y Ashleigh Barty y Angelique Kerber han sido capaces de ganar tres. En los WTA 1.000 ocurre algo parecido, con seis campeonas en los siete torneos que se celebraron en 2021, y pareció revertir la tendencia Iga Swiatek en este curso, ganadora la polaca en Doha, en Indian Wells, en Miami y en Roma. Pero se le escapó Madrid (Ons Jabeur) y Toronto (Simona Halep) y tampoco ha podido repetir en Cincinnati.

En las pistas de Ohio ha sido Caroline Garcia quien celebró el título de su resurrección. Y con más lustre todavía si se cuenta que no tenía ranking suficiente para tener una plaza en el cuadro final y se la ganó desde la previa, primera en conseguirlo. Tiene Cincinnati ese algo de ilusión que ha hecho reverdecer dos carreras que parecían destinadas a la oscuridad.

«Si no llega a ser por mi fisioterapeuta estaría en el sofá bebiendo vino», bromeó el croata. Porque Coric y Garcia celebraron el domingo con sonrisas, y quizá con vino, tras un peregrinaje por el desierto y un paso por las catacumbas. Después de un reseteo total en su tenis, su cabeza y su ilusión; más cerca, sobre todo Coric, de la retirada que de ocupar otra gran portada.

El croata y la francesa tuvieron sus mejores momentos entre 2017 y 2018. Llegaron a ser 12 del mundo él y 4 ella. Coric ganó sus dos títulos (Marrakech 2017 y Halle 2018) y ya había firmado partidos de entidad contra Nadal, a quien ganó dos de las cuatro veces que se habían enfrentado hasta el momento, y a Federer, a quien arrebató el título en su hierba alemana. Hasta que el hombro derecho comenzó a dar problemas, obligado a perder velocidad, la estela de los grandes y la suya propia, orientado como estaba a ser un digno sucesor de Grand Slams y un año y medio porque, al final, tuvo que operarse. Garcia, 28 años, tenía los títulos de Bogotá, Mallorca, Estrasburgo, Pekín, Wuhan, Tianjin y Nothingham antes de su 'desaparición' por malos resultados y menos confianza.

A ninguno de los dos se les fue la ilusión por el tenis. Tanto es así que Coric volvió en marzo, sumó un par de victorias en diez partidos y aceptó pasar por el circuito 'challenger' para coger rodaje y ciertos automatismos que solo las victorias ofrecen. Después del verano, una nueva oportunidad y el mejor tenis de su vida. En la misma semana, victorias ante jugadores asentados en la élite como Musetti, Auger-Aliassime, Bautista y Norrie; y, para nota, triunfos sobre estrellas como Nadal (todavía mermado por la lesión abdominal) y Tsitsipas (7-6 (0) y 6-2 en la final). Garcia cambió al equipo en mayo de 2021; aire fresco para empezar a disfrutar y centrarse solo en el día a día. Como esta semana para el recuerdo: un partido tras otro, ocho en nueve días, hasta abrazar el trofeo, ganado a Petra Kvitova (6-4 y 6-2). Coric y Garcia, resurrección completa, campeones que nadie esperaba. Salvo ellos.