Copa de Maestros: Lección de Djokovic a Nadal

No tiene el Masters porque Novak Djokovic se agarró con uñas a su corona , un enorme campeón que se consagró de nuevo en el eléctrico azul del O2 (6-3 y 6-4) , pero cierra 2013 con la inmensa sensación de sentirse el mejor del planeta, dueño de diez títulos siendo dos de ellos Grand Slams y cinco Masters 1.000. Hace un año, Nadal apenas podía andar con normalidad, atrapado en su lesión, y ahora es el mejor del mundo . Hasta en su derrota hay honor. [Así lo hemos contado]

Puede que su maravillosa temporada mereciera un desenlace más alegre, pero contra Djokovic, arrollador en este otoño de cemento, Nadal sabe a lo que se expone. A remolque desde el primer intercambio , ofreció resistencia desde su ambición y amor propio, pero no basta ante semejante oponente.

Djokovic enlaza títulos en Pekín, Shangháai. París-Bercy y LondresEl balcánico está desatado y no ha perdido ni un solo partido desde que se le escapó la final del US Open, 22 tardes del tirón cerrando el puño con esa mirada tan agresiva que siempre regala a su palco. Enlaza títulos en Pekín , Shanghái , París-Bercy y Londres y ahora persigue la Copa Davis, que se celebra el próximo fin de semana entre Serbia y la República Checa. Difícil de superar a un tenista así, casi imposible.

Djokovic ni se presentó, un ciclón empeñado en gritar a los cuatro vientos que él es el verdadero maestro del tenis. En un periquete, con ese arranque demoledor que entusiasmó a las 18.000 gargantas que abarrotaron el pabellón, rompió el saque del zurdo e incluso se puso con pelota de break para estirarse hasta el 4-0, momento de máxima tensión que sirvió para que despertara Nadal .

Cuando le vio las orejas al lobo, y motivado desde la exigencia como siempre ha sido en su carrera, el número uno del mundo dibujó un partido diferente y devolvió a la cita la igualdad que se imaginó en cualquier previa. El problema es que se cargó de dobles faltas (cuatro en dos servicios) y volvió a dar alas a su enemigo , una renta que esta vez no desaprovecharía. En 44 minutos, primer set para Djokovic, cerrado a lo grande con un ace.

El serbio, durísimo

A medida que avanzó la final, y ahuyentados los nervios, subió el nivel del capítulo 39 de esta rivalidad, definitivamente instaurada como el clásico de hoy, el clásico de estos tiempos. Djokovic y Nadal regalaron puntos memorables y la batalla desde el fondo de la pista fue durísima , casi siempre dominada por el serbio porque fue quien tomó la iniciativa. Lanzaba bombas desde cualquier rincón y el español corría a la desesperada para defenderse de cualquier manera, sometido a un permanente golpeó que le dejó aturdido al final de la primera manga.

Nadal despide el año con diez títulos en 14 finales y 75 triunfos por siete derrotasAl balear le faltó energía para reavivar el fuego, agotado después de un maratón con 82 etapas. Desde febrero, desde que volvió en Chile a la tierra de Viña del Mar, Nadal no se ha detenido y en todos los torneos, con la excepción de aquel patinazo sonado de Wimbledon, ha llegado, como poco, a las semifinales. Eso implica ganarlo casi todo, pues da carpetazo a la campaña con un impresionante 75-7 en el balance de victorias y derrotas.

Tres de esos tropiezos son con Djokovic, que definitivamente es el jugador que más daño le ha podido hacer jamás. El serbio conoce tanto a Nadal que le redujo a base de fuerza, incuestionable su triunfo para echar el cierre a la temporada antes de pensar en su país y en otra Copa Davis. Y le costó porque Nadal, en la infinita muestra de orgullo, salvó dos bolas de campeonato a lo grande .

El derrotado, por su parte, no se siente como tal porque su año obliga a sonreír eternamente. Los mordiscos en Sao Paulo , Acapulco , Indian Wells , Barcelona , Madrid , Roma , Roland Garros , Montreal , Cincinnati y US Open son muchos más de los que podía esperar. Aunque no tenga título, Nadal es un maestro .