ENTREVISTA
Tomás Carrió, técnico del Cajasol Real Ciencias: «Quiero un equipo con carácter que pelee cada pelota, busque los partidos y se entregue al máximo»
RUGBY
Este exjugador argentino de 36 años y con nutrida experiencia en el rugby español lleva esta temporada las riendas del conjunto sevillano en División de Honor
El argentino Tomás Carrió entrenará al Real Ciencias La Carloteña en la temporada 2025-2026
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Iniciar sesiónEl Cajasol Real Ciencias depositó este verano la confianza de su banquillo en el argentino Tomás Carrió, que acababa de ponerle en Italia el punto final a su etapa como jugador en activo. De 36 años y formado en Curne (Club Universitario de Rugby ... del Nordeste), el ahora entrenador científico jugó para diferentes selecciones de su país, computando seis caps con los Pumas, y en España militó en dos grandes, Quesos Entrepinares y Recoletas Burgos. Carrió, que jugaba de apertura, ya había hecho sus pinitos en el banquillo en categorías inferiores, pero no en la División de Honor. Su estreno como técnico al máximo nivel del rugby español está siendo con el Ciencias, que ha adecuado su realidad deportiva a su contexto económico e inicia, de la mano de Cajasol, una nueva etapa. Sin grandes exigencias pero sin dejar de lado la ambición. En los días previos al estreno científico en la Cartuja, ante la Santboiana (domingo, 12.30 horas), el argentino conversa con ABC de Sevilla.
-¿Cómo están siendo sus primeros meses en Sevilla y la integración al club?
-La verdad es que muy bien, muy contento. Realmente, el club me está tratando como si fuera mi casa. Estoy muy contento por cómo me han recibido todos, desde la directiva a los jugadores. La gente del Ciencias ha estado muy cariñosa conmigo, muy cercana y me siento como en casa.
-Tiene 36 años y la pasada temporada estaba todavía jugando, ¿no?
-Correcto, correcto, todavía jugaba el año pasado.
-Dejar ya el rugby en activo y ponerse al cargo del banquillo, ¿fue una decisión muy meditada o más producto de un impulso?
-No, no. Hace años, cuando regresé a España en 2019, empecé a hacer los cursos de entrenador de la Federación y World Rugby. En abril del año pasado ya los terminé. Tuve experiencia haciendo de entrenador-jugador en categoría sub 23, mientras jugaba, así que es algo que vengo haciendo desde hace mucho tiempo. Siempre quise dar el salto a ser entrenador cuando dejara de jugar.
-Entrenó al sub 23 del Aparejadores en Burgos.
-Correcto, sí. Cuando estuve en el Aparejadores entrené ahí dos años, al sub 23.
-¿Y qué tal esa experiencia?
-Muy buena, se aprenden muchas cosas. Uno cree como jugador que lo sabe todo. Y luego, cuando vas al campo, hay que planificar prácticas, organizar un día de partido, viajes... Hay muchas cuestiones por ahí que no se ven por parte del jugador. El jugador sólo ve lo que está en el campo. Hay mucho trabajo, mucha planificación, mucha organización detrás que no tiene que ver 100% con el rugby. Hay muchísimas cosas que uno va aprendiendo en eso y la verdad es que me están sirviendo mucho esas experiencias hoy por hoy. Voy un poquito más rápido de lo que podía esperar, digamos.
-Físicamente, ¿tenía cuerda para seguir jugando?
-No, no, no. Tengo una rodilla que está malísima. Muy, muy mala y muy golpeada. Realmente el año pasado sufrí mucho y creo que fue lo más lógico dejar de jugar. También creo que con el abandono del cuerpo viene el abandono de las ganas de seguir jugando y compitiendo. Competir contra chicos de 22 y 23 años todos los días es bastante difícil a una edad. Llega un momento en que ya como que no tiene tanto sentido el esfuerzo que hay que hacer.
-Cuénteme cómo se gesta su fichaje por el Ciencias.
-A través de la llegada de Juan González como director deportivo del club. Yo lo conozco de mi etapa como jugador en Burgos. Entrenó ahí un año. En los cursos de entrenadores de la Federación me ha tocado compartir aula con él porque él era profesor de esos cursos. Creo que entablamos una muy buena relación, nos conocemos bastante, tenemos buena afinidad y hablamos un poco el mismo idioma. Fue realmente un orgullo para mí y una alegría que él y el club pensaran en mí como posible entrenador del Ciencias en su momento. Por ahí vienen las relaciones con el club de Sevilla.
-Cuando lo llaman y se lo proponen, ¿pide un tiempo o la respuesta es sí de inmediato?
-No, no. Fueron varias semanas de charla y negociación. También tenía otra opción para entrenar y estuve tratando de decidir bien lo mejor para mí y para mi futuro. Quería entender bien cuál es el proyecto del club y creo que es un proyecto muy serio con muchas cosas que me gustan. Estoy contento con la decisión tomada.
-¿Algún objetivo en concreto a nivel deportivo? ¿Qué le dijo el club?
-No hay un objetivo de resultados en sí más allá de que obviamente queremos ser competitivos y que el Ciencias esté lo más arriba posible. Es lógico, todo el mundo quiere ganar y competir al máximo nivel. Tendremos que ajustar un montón de cosas, que es lo que estamos haciendo, para tratar de que el Ciencias esté en lo más alto de la tabla y siempre bien representado. Eso depende también de mucho trabajo que hay que hacer debajo para que eso sea algo natural, como le digo. Hay mucho trabajo de proceso, semana a semana, día a día. Y trataremos de ser lo más eficientes y profesionales posible.
-En los últimos años, el Ciencias ha estado arriba peleando con los mejores equipos, pero esta temporada, económicamente el club ha descendido algún peldaño. ¿Deportivamente se está preparado para estar ahí arriba de nuevo o la afición debe de ser consciente de que se inicia una nueva etapa diferente?
-Estamos en el comienzo de una etapa diferente, claramente. Hay una mucha gente nueva dentro del club, no sólo jugadores y staff sino también directivos. Hay una estructura nueva. Y eso lleva tiempo de engranaje, de aceitado. Todo es un poco novedoso para algunos, si bien mucha base se mantiene del año pasado, lo cual es muy positivo, pero es un proceso nuevo. No estoy abriendo ningún paraguas, esta es la realidad. Tenemos que ir partido a partido, semana a semana, e ir construyendo una mejor identidad y una mejor cultura dentro del club y del equipo. Y pelear cada domingo hasta el último momento.
-¿Usted va a mirar a la cantera? Siempre tuvo mucha tradición este club de hacerlo, pero en estos momentos quizás sea incluso más necesario.
-Sí, sí, más allá de necesario, creo que tenemos mucha calidad en la cantera. Están subiendo jugadores con credenciales y realidad de jugar en el primer equipo. No es que por necesidad lo vayamos a buscar, es que realmente hay calidad y eso ayuda a mi trabajo. Y creo que es un objetivo también que tiene el club, lo cual me incentivó mucho a venir a trabajar aquí. Creo que el rugby es siempre de abajo hacia arriba, es una pirámide grande desde abajo. Y la cúspide, en este caso, es el primer equipo. Eso se tiene que ir reflejando año a año, que cada vez seamos más chicos de Sevilla, más chicos del Ciencias, toda la vida jugando para su club.
-¿Qué sello le quiere imprimir al juego del equipo?
-Que sea un equipo con carácter, un equipo que pelea cada pelota hasta el último momento, que va a buscar los partidos, que quiere ser protagonista y que se entrega al máximo.
-¿Les habla mucho a los chicos? ¿Es un entrenador intenso en ese sentido durante la semana?
-Intentamos ser lo más detallistas posible y ser claros con el mensaje que queremos. No tratar de abarcar tantas cosas, sino cuatro o cinco puntos clave y hacerlos al máximo. Tratamos de trabajar mucho en la parte de la intensidad, en la preparación física, sobre todo con Koi Hogg, que es un gran preparador físico y un gran entrenador de delantera. Y con Augusto Macchia tratamos de que el juego empiece por delante y sobre todo con mucha intensidad.
-¿De quiénes se ha rodeado para esta etapa?
-El club ha planteado un staff que, realmente, de haberlo elegido yo, creo que no me habría salido tan bien. Es gente que sabe mucho de lo suyo, que tiene mucha pasión y que quiere que al club le vaya muy bien. Estamos muy contentos trabajando. Vamos ajustando cada vez más detalles semana a semana. Nos estamos sintiendo cada vez más a gusto.
-Aunque hace ya un par de semanas de la derrota en Alcobendas, ¿qué análisis podría hacer de lo que pasó allí?
-Hay que aprovechar los buenos momentos del partido y achicar el margen de puntos que nos hacen los rivales cuando están dominando el juego. Ellos aprovecharon y sumaron muchos puntos en sus fases de dominio y nosotros sumamos puntos en los momentos de dominio nuestro, pero no los suficientes como para ganar el partido. Hay que estar más atentos a los reinicios, sobre todo después de marcar. Creo que es una parte fundamental, una vez que uno marca tiene que tratar de salir bien y posicionarse en campo rival. A partir de ahí, empieza todo lo demás.
-Contra la Santboiana es un debut complicado en la Cartuja, ¿no?
-Sin duda. Vienen de ganar muy bien al Alcobendas en Sant Boi. También de pelear el partido que podrían haber ganado tranquilamente en Burgos, lo cual habla muy bien de ellos. Tienen un equipo sólido. Empiezan muy fuertes con los delanteros y son bastante inteligentes con su forma de jugar, con una defensa muy dura. Tenemos que empezar muy bien, sobre todo, y a partir de ahí construir el partido.
-¿Por qué el rugby, Tomás? ¿Cómo empezó su historia?
-Por mi familia. Mi padre ha jugado al rugby, ha sido directivo de mi club, entrenador... Me he criado alrededor de una pelota de rugby con mi familia, mis hermanos y mi mamá, todo el mundo siendo siempre yendo a acompañar. Mi vida es una vida de club, así que estoy muy contento de seguir ligado a esto.
-Empezó en Resistencia, ¿verdad?
-Correcto, mi ciudad natal, exactamente.
-¿Y sigue a otros deportes o toda su atención es para el rugby?
-No, no, un montón. Me encanta el fútbol, me encanta el básquet, ahora estoy mirando mucho fútbol americano... El deporte que veo me gusta, también los olímpicos. Me encanta ver los deportes y equipos argentinos en general. Miro deportes de todo tipo, sobre todo los colectivos, pero miro en general mucho.
-Estará atento entonces a las evoluciones de su compatriota Matías Almeyda en Sevilla, ¿no?
-Sí, sí. Soy hincha del Barça y el otro día, bueno... contento por Matías Almeyda, porque yo soy de River desde chico y él fue jugador de River. Me alegro de que le haya ido bien, pero quedé un poco triste por el Barça.
-¿Le gustaría asentarse aquí en Sevilla? ¿Lo ve como una opción a largo plazo?
-Todo depende del tipo de trabajo que se está haciendo en el club, depende de la parte laboral, pero obviamente la ciudad es preciosa y se disfruta, sin duda.
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