Nacho, una renovación muy difícil

Con Nacho , como con otro canterano, Dani Carvajal, nunca hubo una discusión para renovar. Ni una polémica, ni un tira y afloja. Llegó oficialmente al primer equipo el 1 de julio de 2012 , aunque debutó en 2011, y suma diez campañas al máximo nivel. Hace tres años renovó hasta 2022. Y ahora, a los 31, se encuentra con la norma de la casa de otorgar contratos de año en año. La misma que se aplica con Ramos.

Al «Lobo» le queda una temporada más en el Real Madrid y si no acepta firmar por otra más, hasta 2023, cosa complicada porque tiene propuestas hasta 2024 y 2025, debería ser traspasado este verano para obtener alrededor quince millones para las flacas arcas de la pandemia.

En esa diatriba, muy dura para el canterano, triste para el madrileño, dolorosa para el central, que llegó a la casa el 1 de julio de 2001 y puede marcharse el 1 de julio de 2021, el futbolista deberá decidir si se marcha ahora, ya, a finales de mayo, o sigue en esas condiciones. Y lo lógico es que se vaya y firme un contrato por tres años y más dinero que sea la rúbrica a su carrera.

La renovación es casi imposible. el 30 de junio. Aunque su rendimiento es espléndido, su edad y la política del Real Madrid obliga a pensar en otros sitios.