Imane Khelif presenta una demanda por acoso cibernético en la que incluye a J.K. Rowling y Elon Musk

El debate donde se señalaba si la deportista se trataba de una mujer trans, intersexual o con un trastorno del desarrollo sexual ha sido la principal polémica que ha acompañado a Khelif durante su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024. No obstante, su pasaporte argelino, nación que no permite el cambio de género, señala que es mujer.

Estas conjeturas provocaron un acoso masivo cibernético contra la luchadora, que se produjo mayoritariamente a través de las redes sociales. Buena parte de estos ataques se produjo en la red social X, que ha sido la empresa que ha recibido la demanda por parte de Khelif, según ha desvelado la revista americana Variety.

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Esto significa, según la ley francesa, que la demanda fue interpuesta contra personas desconocidas, es decir, la Fiscalía goza de libertad para investigar a todas las personas, incluidas aquellas que hayan podido escribir mensajes de odio bajo seudónimos. Sin embargo, el texto menciona a figuras famosas y controvertidas, como el millonario empresario o la escritora británica.

«A una joven boxeadora le acaban de arrebatar todo lo que había logrado con su trabajo y entrenamiento porque permitieron que un hombre se subiera al ring con ella. Son una vergüenza, su protección es una broma y #París24 quedará manchado para siempre por la brutal injusticia cometida contra Carini», fueron las palabras que compartió J.K. Rowling en su cuenta de X.

Mientras, el fundador de Tesla respondió «absolutamente» a una publicación de la nadadora Riley Gaines donde arremetía también contra la argelina, tras su combate de boxeo contra Angela Carini, que terminó en 46 segundos, tras la decisión de la italiana de retirarse de la pelea después de recibir algunos golpes de Khelif.