Jenni Hermoso reivindica su legado: «He hecho mucho más que ganar un Mundial»

En el avance que se dio a conocer el pasado viernes, la delantera del Tigres aseguró en relación a Jorge Vilda: «Cuando nos íbamos a dormir teníamos que dejar la puerta abierta, esperar a que él pasara por la noche y dejar que hablara con nosotras. Decía que era el único momento que tenía para hablar con nosotras. Tienes todo el día... Pero si tocaba la primera puerta de las dos primeras jugadoras hasta que llegaba a la última, a lo mejor había jugadoras que se dormían. O nos íbamos a comprar, nos esperaba y nos preguntaba qué llevábamos en la bolsa».

Ante la perplejidad de Calleja, Jenni afirmó que eran parte de sus reclamaciones, además de viajes, preparación, etc. Sin embargo, todo ello no fue suficiente para Hermoso se uniera a las 15 amotinadas originales, ni a aquellas que se mantuvieron hasta el final y renunciaron a la Copa del Mundo. «Yo entendía la causa, pero no entendía las formas y decidí hacerlo a mi manera. Yo quería jugar un Mundial y jugar en la selección, que para mi era una de las cosas más importantes. Yo intenté desde dentro transformar lo que estaba mal o mejorar lo que queríamos», aseveró.

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«A pesar de todo, fuimos campeonas. Vilda tuvo también su culpa de que fuéramos campeonas», a lo que añadió el poco mérito que se les otorga a las españolas: «Nos valoran más fuera de lo que nos valoran en nuestro país. Tú vas a EE.UU. y no te crees la cantidad de gente que admira a la futbolista española».

«Hasta el día de hoy, no he sido capaz de revivir ese momento», admitió una Jenni visiblemente emocionada. Asimismo, reivindicó la actitud que tuvo durante los instantes posteriores al beso de Rubiales. «Yo sigo riendo. Cómo no iba a seguir sonriendo. Me juzgan porque seguía disfrutando. En ese momento era imposible meterte y pensar qué ha pasado. Me quitasteis el mejor momento de mi vida».

Hermoso defendió su decisión de denunciar a Rubiales en la justicia ordinaria. «Me hizo mucho daño, a mí y a mis compañeras. Y sobre todo que es un acto que se debía denunciar. Sentí el valor, la fuerza y estaba haciendo lo que creía que era lo correcto», tras lo que añadió que la presión mediática le hizo escapar. «Tuve que huir, cuando yo no había hecho nada. Bueno sí. Ahora he hecho mucho más que ganar un campeonato del mundo», concluyó.