Jugar con cuatro amonestaciones en la cabeza es un arte. Aguantar las entradas y las tarascadas sin responder, ni física ni dialécticamente, es una prueba de fuego. El Real Madrid tiene un calendario mucho más complicado que el Barcelona y sus jugadores hacen filigranas para ... evitar las tarjetas y disputar los partidos clave. Cristiano, Xabi y Coentrao sobreviven con la amenaza de la quinta cartulina desde hace tiempo.
El portugués lo tiene más fácil, porque no juega constantemente. Ronaldo y Alonso tienen el mérito de sujetarse durante jornadas y jornadas sin recibir quitarse esa tensión de encima. El goleador lleva doce partidos con ese control mental de no contestar a las patadas que sufre. Xabi dribla la situación al límite. Su labor es más arriesgada. Debe cortar los contragolpes del enemigo y coquetea con la amonestación en cada acción. Los tres han llegado ilesos para disputar el derbi frente al Atlético. Su siguiente misión será estar en el Camp Nou el 21 de abril, a las 20 horas. Para ello, tendrán que superar dos retos previos: el duelo del Calderón y la visita del Sporting al Bernabéu.
Alonso cortó por lo sano en la primera vuelta. Llegó al partido con el Atlético con cuatro amarillas y recibió la quinta en ese encuentro. Descansó ante el Sporting y llegó limpio al clásico. Ahora podría repetir esa decisión, al igual que Coentrao. Cristiano intentará aguantar. Ya suma doce enfrentamientos sin castigo. Es posible incluso que no dispute el partido completo ante el conjunto de Clemente.
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