Casillas, dispuesto a dar la puntilla a Mourinho

El todopoderoso Chelsea vive las horas más bajas de la «era Abramovich» , sobre todo después de perder el pasado fin de semana en casa frente al modesto Bournemouth, que además llegaba con tres bajas de peso. Resultado: los «blues» agonizan a solo dos puntos del descenso en la Premier y la paciencia se le está agotando al magnate ruso, habitual valedor del exentrenador del Real Madrid pero que tal vez no le perdone un traspiés europeo.

Momento crucial por tanto, incluso propicio para que Casillas consume una venganza contra el que fue su azote en el Bernabéu desde que no quiso obedecer sus ataques antibarcelonistas y prefirió conciliar con Puyol y Xavi por el bien de la selección española.

El guardameta es consciente de lo que se juega el Oporto, club en el que Mourinho le auguró una trayectoria crepuscular tras salir de La Castellana por la puerta de atrás. El 2-1 de la ida en el Estádio do Dragao el 29 de septiembre tuvo a Íker como protagonista destacado, aunque recientemente falló ante el Dinamo de Kiev con una «cantada» monumental, antesala de un inoportuno 0-2.

Esta derrota ha dado vida a los ucranianos, que aún tienen posibilidades de clasificarse si ganan al ya eliminado Maccabi de Tel Aviv y pierden el Chelsea o el Oporto. «The Special One» está contra las cuerdas, como sabe muy bien. El vestuario no parece apoyarle y el triunvirato español ( Diego Costa , Pedro , Cesc Fábregas ) no responde esta temporada. Quién le iba a decir a él que su futuro pasaría literalmente por las manos de Casillas.

La peor pesadilla se cierne este noche sobre Stamford Bridge , acostumbrado a llegar al menos hasta los cuartos de final de Champions League pero que no las tiene todas consigo esta vez. Más bien al contrario.

Los nubarrones acechan y pueden hacer que Don José viva la humillante situación de ser despedido, todo un golpe para su línea de flotación arrogante. Mucho más cuando su máximo rival, Pep Guardiola, disfruta del éxito en el Bayern Múnich y tal vez llegue a desembarcar en el Reino Unido. Las especulaciones están servidas, y hay quien apunta incluso hacia un supuesto retorno de Mourinho al Real Madrid.

Todo pasa por Londres, donde esta noche se disputa un partido mucho más decisivo para el técnico de Setúbal que sus épicos duelos ante el mismo Barça donde ejerció como traductor en la etapa de sir Bobby Robson en el banquillo.