De Antic a Quique, catorce años después

Trece entrenadores han caído desde el último doblete de 1996. Ahora, Sánchez Flores busca otro doble título para acabar con una época de decadencia

11/05/2010 a las 00:00h.

Radomir Antic hizo soñar al mundo rojiblanco con aquel fichaje de Milinko Pantic, por el que puso dinero para que viniera al Atlético. Fue el preludio de una temporada sensacional, imparable en la Liga y campeón de Copa con aquel cabezazo del centrocampista serbio, que ... no sabía rematar con la testa. Las cosas de los genios. Pantic lo fue. Gracias a sus golpes francos y su toque de balón. Hoy, Quique toma el testigo de Radomir y Agüero de Milinko para reeditar otro doblete, Liga Europa incluida.-

El Atlético actual quiere repetir aquella primavera inolvidable vivida por el club en 1996. El 10 de abril de quel año, Pantic marcó en la prórroga el tanto que dio la Copa al conjunto madrileño en La Romareda. El Barcelona sufrió el primero de los golpes de esa temporada. La derrota en la final le afectó en su rendimiento liguero. Constató que Simeone, Kiko, Penev, Solozábal y compañía formaban un once potente que no cedería en el campeonato de la regularidad. Así sucedió. El 25 de mayo, Kiko y Simeone anotaron frente al Albacete las dianas del 2-1 que otorgaron la Liga al club del Calderón. Madrid celebró el único doblete de la entidad colchonera. En mayo de 2010, tras 107 años de historia, al cabo de catorce cursos sin "cum laude", Quique, Agüero y Forlán pretenden festejar el segundo.

La casa rojiblanca descendió paulatinamente en su nivel competitivo desde aquella primavera del 96, Después de Antic hubo fracasos de un centenar de jugadores y errores en el banquillo. Fueron catorce años en los que se bajó al infierno, se regresó al purgatorio y se comenzó a atisbar el cielo. Una etapa en la que cayeron trece técnicos: Arrigo Sacchi, Claudio Ranieri, Carlos Sánchez Aguiar, Marcos Alonso, Carlos García Cantarero, Fernando Zambrano, Luis Aragonés, Gregorio Manzano, César Ferrando, Carlos Bianchi, Pepe Murcia, Javier Aguirre y Abel Resino. El propio Radomir volvió a la casa en dos interludios, con más pena que gloria. Pero hay que subrayar que entre esos trece preparadores hubo tres que no merecieron el despido. Manzano fue echado en 2004 por no clasificar al equipo para la UEFA por culpa del "goalaverage" en el balance de toda una Liga. Aguirre colocó al club en la Liga de Campeones. Y Abel, también. Las urgencias les dejaron sin trabajo. Ahora, Quique siempre recuerda que su éxito recoge también la labor de Abel y de Aguirre. Caballero es el entrenador actual, en un negocio tan falto de caballeros y repleto de egoísmos.

Con Aguirre, es cierto, el club empezó a resurgir en 2006. El mexicano clasificó al equipo para la Copa de la UEFA y en el segundo año logró devolverlo a la Champions, una meta que sólo Antic había degustado en la campaña 96-97. Destituido Javier en febrero de 2009, Abel supo colocar de nuevo a la entidad en plaza de Liga de Campeones. El mal estreno liguero en la presente temporada 09-10 dejó el banquilo en manos de Quique. Ocurrió el 23 de octubre de 2009. Ahora, el joven preparador busca iniciar otra etapa de estabilidad como la que Antic protagonizó desde 1995 a 1998.