Salvaje agresión de un padre a un árbitro de 16 años en un partido de prebenjamines

El sábado, el padre de un jugador del Bosco, que se enfrentaba al San Andrés en un partido de categoría prebenjamín, agredió salvajemente a un árbitro de 16 años, que sufrió lesiones en la cara, el pecho y el abdomen, por lo que tuvo que ser trasladado a un hospital, donde pasó la noche en observación. El menor, de origen argelino, ha sido dado de alta este domingo.

La cobarde agresión tuvo lugar cuando el árbitro dio por finalizado el encuentro. En ese momento, el padre de un futbolista del Bosco y otra persona se dirigieron hacia el colegiado con la peor de las intenciones. Mientras su acompañante agarraba al joven árbitro, el progenitor del jugador la emprendió a golpes con él. La rápida intervención de otros padres presentes en el partido impidió que los hechos fueran aún más graves.

Los árbitros del fútbol base leonés ya habían barajado a lo largo de la semana la posibilidad de realizar un plante después de que, el fin de semana, hasta cuatro colegiados se vieran obligados a encerrarse en el vestuario y esperar a las Fuerzas de Seguridad ante la hostilidad mostrada por algunos padres.

José Antonio Alas, responsable del colectivo arbitral en León, reclamó un poco más de paciencia a los colegiadios con la esperanza de que estos actos de violencia no se volvieran a repetir, lo que por desgracia no ha tardado en suceder.

El CD Bosco ha hecho público este domingo un comunicado en el que condena «la acción individual de uno de los jugadores cuyos actos no representan los valores del club» y anuncia que ha tomado las medidas oportunas para que no se vuelvan a repetir incidentes de este tipo. Además, expresa su total apoyo al colectivo arbitral y desea al colegiado agredido una rápida recuperación.