Un colapso de difícil explicación: «Sabíamos lo que teníamos que hacer, pero no funcionó»

Con ceño fruncido y rostro más serio de lo habitual, Scariolo salió a la sala de prensa del Indonesia Arena a intentar convertir en palabras lo que había sido un colapso de difícil explicación. Tras poner por las nubes a Rudy Fernández y Víctor Claver, el transalpino elogió la actitud letona: «Jugaron muy bien, con ideas y concentración de inicio a fin. Su último cuarto fue alucinante».

Pero pronto, comenzaron a saltar las preguntas sobre la falta de acierto en los últimos minutos. «Les dejamos jugar fácil. Necesitábamos una eficiencia que no llegó. Es una asignatura pendiente que tenemos. También les dejamos meter 27 puntos. En general, no hicimos un buen final de partido. Teníamos un plan, sabíamos lo que teníamos que hacer, pero no funcionó».

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Tampoco pasó inadvertido que Juan Núñez y Santi Aldama, los dos debutantes que tan bien le habían sentado al equipo en las primeras jornadas del Mundial, jugasen nueve y siete minutos respectivamente. La responsabilidad recae sobre los hombros de los que han vivido muchas situaciones así. «En estos partidos, la experiencia es un factor importante», se justificó Scariolo.

Rudy Fernández, que celebraba (con sabor amargo) el gigante récord de haberse convertido ante Letonia en el hombre con más internacionalidades de la historia de España, encerraba un buen enfado. Sentado al lado de su técnico, cuando fue preguntado por si la derrota había sido por falta de concentración, su respuesta fue simple: «Sí, estoy de acuerdo».