El penúltimo show de Kobe Bryant

En efecto, no lo era: del otro lado estaba Kobe Bryant , la réplica más parecida a Jordan que ha existido, que forzó una falta y con dos tiros libres llevó el partido a la segunda prórroga, donde el Oeste ganó el partido y Garnett, el premio al jugador más valioso (MVP). Trece años después es el adiós de Bryant el que centra los focos en el All Star de Toronto, en mitad de la despedida eterna en la que ha convertido esta temporada.

Bryant es el máximo anotador de la historia del All Star –aunque tiene a LeBron James a solo dos puntos– y el jugador que más premios de MVP del partido ha recibido (cuatro, empatado con Bob Pettit). La primera vez que ganó el trofeo fue en 2002 en Filadelfia, su ciudad natal, que recibió la entrega con abucheos; la afición de la NBA no terminaba de ver con buenos ojos a aquel chico displicente que ya había sido campeón de la liga dos veces con los Lakers.

Todo ha cambiado mucho desde entonces y Kobe, con el estatus de leyenda viva –el viernes le preguntaron cómo le gustaría ser recordado: «como un mito, un jugador grande», respondió él–, seguirá coleccionando ovaciones en la fiesta de esta madrugada (1.30 horas, #0 y Canal+ Deportes) en Canadá. Conociendo el afán competitivo de Kobe, la gran pregunta es si dentro de la cancha hará lo mismo que hizo su referente Jordan en su día: ser el protagonista e ir a por el MVP de un partido de tono relajado en el que nadie juega en serio hasta la parte final.

«El partido no es competitivo hasta el último cuarto», reconocía Pau Gasol en una videoconferencia desde Toronto a la que fue invitado ABC. «En los minutos anteriores se juega más para divertirse, y yo creo que así es como hay que afrontar el partido», añade el español, aunque matiza que siempre que juega desea «ganar».

Para Gasol la cita también es especial por la despedida de Bryant, compañero durante seis años (y dos campeonatos) en los Lakers y amigo personal del «24» «El domingo –por esta madrugada– estaré contento por él. Es algo muy especial disfrutar tu última temporada como él lo está haciendo. Me voy a sentir feliz y orgulloso de él », declaró el pívot de los Bulls.

Entre los obstáculos que tendrá Bryant si quiere ganar su quinto MVP del All Star Game –en 18 participaciones: solo se lo ha perdido una vez en su carrera– se cuentan su inevitable declive como jugador y la feroz competencia. En su equipo estará, por ejemplo, Kevin Durant , que dejó claro que «Kobe es un modelo a seguir», pero despachó con un «que pase lo que tenga que pasar» al ser preguntado si dejaría tirar más de lo habitual a Bryant.

También jugará por el Oeste Stephen Curry , el MVP e icono de la NBA actual. «En un triple en el último segundo creo que le acabaría pasando la pelota a Curry», confesó Draymond Green, compañero del MVP en los Warriors que hoy también lo será de Kobe. Es la nueva realidad de la NBA, dominada por Curry, pero que esta madrugada rendirá otro homenaje más a Bryant.