La imagen que explica cómo ha cambiado la NBA a través de sus tiros

De este modo, basta con atender a cómo hace un par de décadas el triple era un territorio eventual, reservado únicamente para las circunstancias y los protagonistas más concretos. El contraste con la actualidad es palmario: ensayar un lanzamiento con valor de dos puntos es ya un acto de rebeldía siempre y cuando el aro no esté sobre la cabeza del jugador.

Se entiende así la relevancia que han adquirido no ya especialistas como Curry, si no cuerpos extraños en el lanzamiento exterior como hasta hace dos días eran los pívots. Basta con ver la destreza que ahora caracteriza a jugadores grandes como Anthony Davis , también Marc Gasol, campeón de la última edición de la NBA con una buena aportación desde el triple.

Es, en suma, el sino de un tiempo en el que los movimientos interiores de iconos como en su día lo fueron Kobe Bryant o anotadores consumados como Carmelo Anthony son pasto de la hemeroteca. El baloncesto hoy camina entre la garantía y la apuesta a la grande, cada vez más atado a lo estadístico, cada vez más desligado de sus orígenes.