Marta Xargay: «Tenemos que luchar el doble que los chicos para aparecer un poco en los medios»

—Después de una primera fase irregular, arrasaron en cuartos. ¿Cambia algo en el equipo cuando se acercan las rondas finales?

—Ufff (resopla). No lo sé. Es verdad que ante Rusia nos salió un partido redondo, pero el equipo no ha cambiado. Somos las mismas desde el principio, pero hay días que te salen mejor las cosas y en cuartos ejecutamos el plan de partido a la perfección.

—¿Se entrena esa mentalidad ganadora de alguna manera?

—En España, desde pequeñas estamos acostumbradas a competir y a jugar partidos a vida o muerte y eso ayuda a que a la hora de la verdad sepamos dar nuestra mejor versión. Lo hemos pasado mal en muchas ocasiones, como en los Juegos de Río en cuartos o en el Europeo de 2015, y esa cicatriz nos impulsa ahora en lugar de hundirnos. Además, tenemos un cuerpo técnico que nos ayuda a estar más seguras con nuestro trabajo y eso es decisivo en estos momentos.

—¿Pueden salir las cosas todavía mejor en semifinales?

—¡Esperemos que sí! Lo de cuartos debe darnos motivación y tranquilidad. Debe servir para reafirmar nuestra confianza y que sepamos que estamos haciendo las cosas bien. Pero tampoco hay que venirse arriba. Aunque ganáramos fácil a Rusia, frente a Serbia va a ser muy complicado porque van a contar con mucho apoyo de la grada.

—¿Es de las jugadoras que disfruta jugando con el público en contra?

—He vivido las dos situaciones y las dos me motivan. La final que ganamos en el Europeo de 2013, contra Francia en su casa, fue increíble. Creo que solo había 20 españoles en la grada en total y, aun así, conseguimos llevarnos la victoria y la medalla de oro. En mi caso, es una motivación extra.

—¿Puede pesarle a Serbia jugar en casa?

—Un poco sí puede perjudicarlas, pero creo que el sentimiento que pueden tener de poder hacer historia en casa y ante su público va a superar esa posible presión extra que puedan tener.

—Han conseguido que la baja de Alba Torrens no se note en la cancha, ¿la echan de menos en el vestuario?

—Claro que sí. Porque Alba es una gran jugadora, una de las referentes desde hace muchos años, aunque creo que al no estar desde el principio ha hecho que el equipo se construyera sin pensar en ella y eso ha hecho que la baja sea menos traumática. Si hubiera ocurrido una desgracia en forma de lesión durante la concentración creo que sí habría afectado al grupo. La echamos de menos, pero creo que hemos sabido adaptarnos a su ausencia y esperemos que sigamos haciéndolo.

—¿Es esta la España más solidaria?

—No lo creo. Siempre hemos sido así. Está claro que ella era nuestra referente, pero el juego de equipo ha sido nuestra identidad y por eso hemos conseguido todas estas medallas estos últimos años.

—Esta podría ser la séptima consecutiva para este equipo. ¿Sigue ilusionando?

—Por supuesto. Ilusiona y mucho. Luchar por una medalla es algo por lo que llevamos casi dos meses trabajando. Es la recompensa a todo este tiempo y estamos contentas por ello. Hay ilusión y ganas. No da vértigo, porque estamos preparadas para esto y queremos disfrutarlo.

—¿Le llegan muchos mensajes al teléfono después de un partido?

—Sí, y menciones en las redes sociales. La gente se ha volcado con nosotras y se siente el cariño aunque estemos lejos. Es una motivación extra para afrontar cada partido. Estamos haciendo un buen torneo y la gente se está enganchando a nuestro juego y eso es bueno.

—¿Siente que ha cambiado un poco la repercusión del deporte femenino desde aquella primera medalla en 2013?

—Sí. Pero hemos tenido que esforzarnos mucho para conseguirlo. Llevamos siete años consecutivos ganando medallas y son muchos partidos detrás y muchas horas de entrenamiento. Durante la temporada no recibimos ningún tipo de llamadas ni de atención, pero la federación ha conseguido que en verano sí que se valore más nuestro trabajo. Y eso se nota, porque los medios se vuelcan con nosotras y la gente también. Poco a poco se va viendo que el deporte femenino tiene más repercusión, como ahora con el fútbol. Ellas han abierto telediarios y periódicos y todo lo que sea apoyarnos unas a las otras es positivo. Todas estamos en la misma lucha. Necesitamos visibilidad. Trabajamos igual que los hombres y tenemos menos de la mitad de visibilidad. Tenemos que luchar el doble que los chicos para aparecer un poco en los medios.