Saúl resucita el día del niño

A la fiesta también quiso sumarse Saúl. El que durante muchos años fuera niño prodigio de la cantera colchonera ha visto como su estrella se ha apagado en los últimos años. Hoy el Cholo sorprendía dándole la titularidad (las apuestas apuntaban a otro niño, Pablo Barrios) y a los once minutos robaba en tres cuartos y se sacaba un disparo desde la frontal al palo. El rechace lo mandaba a la red Morata, pero estaba en fuera de juego. Otra vez. El madrileño vive siempre en la línea del fuera de juego y demasiadas veces por delante de ella.

Pero la estrella que sigue brillando es la de Griezmann. El francés volvía a encontrarse con la madera en una jugada en la que Osasuna le dejó conducir muchos metros y pegarla desde fuera del área. Tres palos en apenas cuarto de hora.

También estaba juguetón Yannick Carrasco. El belga percutió por su banda y sacó la ovación de la grada en una jugada en la que se marchó de dos contrarios cuando parecía acorralado. Aunque para ovación la que se llevó Saúl por una ruleta en su propio campo. El ilicitano era titular por segunda vez desde el parón por el Mundial (que se dice pronto) y veremos si es capaz de hacerse un hueco en estas últimas jornadas ante las bajas de Lemar y Llorente en el medio. Su continuidad de cara a la próxima temporada está en entredicho. Hoy, desde luego, cumplió con creces.

Mientras tanto Osasuna se mostraba bien plantado, aunque sin mordiente. Cuando se acercó al área de Grbic faltó siempre el último pase. La única clara la tuvo el Chimy, que recogió un rechace de un balón que él mismo no había logrado rematar, y envió la bola fuera a la derecha del meta croata. Un Grbic, por cierto, muy cuestionado por sus últimas actuaciones, más aún después de su fallo garrafal en Elche. La sombra de Oblak es alargada. Y veremos cuán larga es su lesión en las cervicales. De momento lleva parado un mes y sopesa pasar por el quirófano.

Fue al borde del descanso cuando se rompió el partido. Y también Morata. David García noqueó al delantero internacional en un choque por alto, y después se juntaron los tres más animados en la fiesta. Saúl lanzó un gran balón en largo para Griezmann y el galo ya tenía claro lo que iba a hacer: carrera y asistencia al segundo palo para que Carrasco fusilara a Sergio Herrera a bocajarro. Sexto gol en Liga del belga, decimotercera asistencia del francés, el líder de este ranking con mucha diferencia (le siguen Vinicius y Mikel Merino con nueve).

Aunque la factura del gol fue la lesión de Morata, que se marchó a los vestuarios antes del intermedio con un traumatismo cervical y ya no comparecería en el segundo acto. Su lugar lo ocupó Ángel Correa, pero el partido se reanudó como terminó la primera mitad. Carrasco gustándose con un pase de tacón y el centro chut de Griezmann provocaba el huy del Metropolitano.

Osasuna no se estiraba demasiado, pese a la desventaja. Aunque en el 52 logró hacer algo que no hizo en todo el primer tiempo: disparar a puerta. Aimar sacó un tiro blando que blocó Grbic tras un centro raso de Manu Sánchez, que volvía a casa. El Atlético busca lateral izquierdo, pero no parece pensar en Manu, que cumple su tercera campaña cedido en Pamplona.

Minutos más tarde los rojillos (hoy de negro) volvían a acercarse, esta vez con más peligro. Un centro bombeado por Rubén García lo cabeceó fuera Budimir. Osasuna avisaba, pero el Atleti mataba. De Paul picaba un pase dentro del área para Saúl, que llegando desde atrás la bajaba con el pecho y la reventaba con la derecha. Con la diestra y contra Osasuna, como en la primera vuelta (sus dos únicos goles de la temporada han sido contra los navarros). Golazo del ilicitano, que ya avisamos de que también se quería sumar a la fiesta del niño, y no podía encontrar mejor día: balón a la tripa y dedicatoria para el hijo que está en camino.

Tuvo el tercero Griezmann, en una jugada ensayada tras una falta lateral que mandó fuera por centímetros, y más tarde Carrasco, que se enfrascó en un eslalon al que no encontró fin. Y Jagoba Arrasate intentó mover el árbol haciendo cuatro cambios: Ibáñez, Kike Barja, Iker Muñoz y Kike García saltaron a escena. Este último probó fortuna a bote pronto desde la frontal, pero su tiro salió desviado.

Por su parte, Griezmann seguía a lo suyo. Soltó un buen zurdazo cruzado, pero la pierna izquierda de Herrera le privó del gol. Gol que encontró Correa. El argentino, convertido de nuevo en eterno suplente (sólo ha sido titular en dos de los últimos once partidos) definió por bajo y con sutileza un buen pase filtrado por De Paul.

La fiesta fue completa. Griezmann fue sustituido y se llevó una atronadora ovación, los rojiblancos olvidaron el borrón de Elche, volvieron a golear, son ya equipo de Champions por undécimo año consecutivo y los niños del Atleti fueron felices.