El inolvidable gol de «Panadero» Díaz al Real Madrid

El 2 de enero de 1977 se disputó en el Vicente Calderón el partido de la decimosexta jornada de liga entre el Atlético de Madrid y el Real Madrid. Un derbi para estrenar el año en el que argentino Rubén «Panadero» Díaz , fallecido este martes, hizo estallar a la grada con un golazo memorable .

«Panadero» Díaz jugó en el Atlético de Madrid entre 1973 y 1977, cuatrio temporadas en las que el defensa disputó 57 partidos de Liga . Durante su participación como rojiblanco en el campeonato solo logró un tanto , pero es inolvidable para los aficionados colchoneros más veteranos.

Se disputaba la segunda parte y el Atlético vencía 1-0 al eterno rival, con gol de Rubén Cano. Los rojiblancos, entrenados por Luis Aragonés , le estaban dando un repaso al enemigo capitalino cuando un centro de Robi fue interceptado con la mano por un defensor blanco, muy cerca del semicírculo del área de Miguel Angel. Falta. Libre directo decretado por el árbitro Orellana Alvarez .

Corría el minuto 63 de una tarde fría y lluviosa. Robi tomó carrera y saltó por encima del cuero para que por detrás llegase «Panadero», quien, con la zurda, se sacó de la chistera un majestuoso disparo que rompió las telarañas de la cruceta izquierda del portero blanco. Un golazo en toda regla, el 2-0 que sentenciaba el envite y que fue celebrado con el júbilo que merecía desde las tribunas. Luego llegarían otras dos dianas, de Rubén Cano y la «joyita» Bermejo, que redondearon un 4-0 histórico.

El público colchonero volvió a casa esa tarde gozoso por el baño. Los que allí estuvieron no lo olvidan, ni tampoco el tanto de «Panadero», en la retina de los afortunados que pudieron festejarlo en la vieja grada gris de hormigón del mítico estadio Vicente Calderón.

Este martes, 16 de enero de 2018, cuando se conoció la noticia del fallecimiento de «Panadero» Díaz en una clínica de Buenos Aires a los 72 años por complicaciones sufridas tras someterse a una operación en la aorta abdominal, ese magistral tanto volvió a la mente de los aficionados rojiblancos que lo habían vivido en directo.