Espartaco: «El sueño de volver a torear en Sevilla siempre está ahí...»

Hacía 28 años que no pisaba una plaza americana. «Si no recuerdo mal, desde 1986, precisamente en Colombia, en el festival a beneficio de los damnificados por el Nevado del Ruiz. Desde entonces no había vuelto a torear por allí».

El motivo para esta decisión está muy claro para el torero de Espartinas. «Su empresario, el torero y amigo El Gino andaba detrás de mí para que acudiese a este coso y que no se dejasen de dar toros en Cartagena de Indias. Quería que fuese el pasado año pero me tuve que operar de cervicales, así que le dije que cuando me recuperase si me veía bien, le echaría una mano. Todo lo que sea ayudar para que no se pierda una plaza de toros es poco.

Define la experiencia como «muy bonita... bueno, hasta que llega el día de vestirse uno de luces (risas). Fue el 3 de enero y como a mí estas fechas me gusta pasarlas en familia, pues me acompañaron mi padre y mis hijos. Pero, sobre todo, lo bonito ha sido poder colaborar para que siga habiendo toros».

De la misma forma piensa acerca de su actuación, el pasado mes de octubre, en la corrida Pinzoniana de Palos de la Frontera. «Me hacía mucha ilusión ese festejo por todas las connotaciones que tenía: conmemoraba los 30 años de alternativa y además en la plaza de Huelva han tomado la alternativa mi padre y mi hermano. La verdad es que salió muy bien todo y estuve muy a gusto y, sobre todo, tuve muy buenas sensaciones en cada uno de los toros que estoqueé.

Mantiene que se retiró en un momento dado, pero que no ha dejado la profesión, que es distinto. «Yo me retiré de la competencia, del día a día, de las temporadas completas. Pero sigo toreando ese tipo de festejos especiales. Ya no voy a conseguir más de lo que he conseguido pero lo hago porque sigo viviendo en torero. Hombre, llegará el día en que diga que hasta aquí pero mientras me encuentre con ganas, ilusión y esté bien físicamente, seguiré toreando. De hecho, en la despedida en Sevilla no me corté la coleta. Y he seguido toreando sobre todo para sentirme torero, que es como me siento.

En el horizonte de este año se encuentra la plaza de toros de Espartinas, que cumple diez años desde su inauguración, en la que participó Juan Antonio. Es sincero cuando se le pregunta si volverá a torear en ella. «La verdad es que no sé qué se va a hacer. Sería bonito, desde luego, poder formar parte y estar en lo que se organice. Se habló de un festejo especial en febrero pero ya se ha echado el tiempo encima. De todas formas, queda toda la temporada».

Y aparece, finalmente, el nombre de Sevilla, de su plaza de toros. ¿Volverá a pisar su albero Espartaco? Piensa un poco antes de responder. «Esa ilusión siempre la tiene quien se sienta torero. El sueño y la ilusión de volver a Sevilla siempre están. Tendría que ser algo muy especial y puntual. Eso nunca se sabe. Sigo viviendo en torero y, por tanto, esos sueños e ilusiones siguen estando presentes. Aunque sea algo difícil...».