Regresa a Italia una carta de Cristóbal Colón robada en Venecia hace décadas y localizada en Texas

No en vano Colón había sufrido lo indecible para conseguir financiación para su expedición y decidió dejar constancia de las vicisitudes vividas hasta tocar tierra en el Nuevo Mundo a miles de kilómetros de la Península Ibérica y durante su regreso. Lo hizo en la misiva 'De insulis in mari indico nuper inventis' ('De las islas de la India sobre el Ganges descubiertas recientemente').

El incunable, sin fecha original pero con treinta copias impresas en Roma en 1493 por el tipógrafo alemán Stephan Planck, consta de ocho páginas de una importancia histórico-bibliográfica inconmensurable. Del documento se conservan únicamente dieciséis ejemplares en todo el mundo, la mayoría en España e Italia, donde se han robado varios, posteriormente localizados en Estados Unidos.

Este tipo de documentos despiertan un genuino interés en los coleccionistas estadounidenses y la epístola terminó precisamente en Dallas tras su sustracción a finales de los años 80 de la Biblioteca Nacional Marciana de Venecia, a la que será restituida, según ha informado el Gobierno italiano.

Tras el robo, la carta acabó en manos de un coleccionista residente en Texas, que la adquirió de buena fe en una subasta por un valor de un millón de euros y no se ha opuesto al decomiso decretado por la Fiscalía de Filadelfia tras conocer el origen ilícito.

Ahora que la epístola ha retornado a Italia, el Gobierno pretende no solo devolverla a la Biblioteca Marciana de Venecia, sino inaugurar en torno a ella una exposición sobre su contenido con el objetivo de acercar a los turistas y los ciudadanos la figura de Colón, según ha informado el ministro de Cultura italiano, Gennaro Sangiuliano.

Ya en 2016 Italia recuperó otra misiva que había sido robada de la Biblioteca Riccardiana de Florencia. Cuatro años antes, el Departamento de Justicia de Estados Unidos recibiera la información de que ese incunable se encontraba en el Congreso de Washington. En este caso, las autoridades creen que la pista del documento se perdió en la década de los 50 y se recuperó en 1988, para ser vendida en una subasta en Christies en 1992.