Premios Grammy: los mejores momentos

El primer gran momento fue en la pre-gala (donde se entregan la mayorái de los premios «menores», y en la que inexplicablemente hubo solo un par de menciones a Bryant), con Rosalía llevándose su primer Grammy : el de Mejor Disco Latino de Rock, Urbano o Alternativo , por «El Mal Querer». La cantante catalana, que se impuso a Bad Bunny, J Balvin & Bad Bunny, iLe y Flor De Toloache, dijo estas primeras palabras en la ceremonia: «Es un honor recibir este premio. Significa mucho para mí».

Lizzo abrió la velada exclamando: «Esta noche es para Kobe», y realizó una espectacular y muy vistosa interpretación de «Cuz I Love You» y «Truth Hurts».

Le sucedieron Blake Shelton y Gwen Stefani , que formaron dueto para cantar «Nobody But You» entre haces de luz. Pretendidamente romántico, pero con poca sustancia.

Alicia Keys no quiso esperar para rendir homenaje Bryant. En cuanto tomó las riendas de la presentación de la ceremonia, dijo que era una noche para reconocer a los mejores artistas del negocio, pero también que «todo sentimos una tristeza demencial, porque hoy, Los Angeles, America y todo el mundo ha perdido a un héroe. Estamos aquí, con el corazón roto, en la casa ue Kobre Bryan construyó. Os pido a todos que lo recordéis durante un momento». Y entonces, se arrancó con «It's so hard to say goodbye to yesterday» acompañada de sus autores, Boyz II Men .

Los Jonas Brothers se encargaron de la difícil tarea de animar a todos a hacer de tripas corazón y seguir con la agenda de sonrisas prevista, cantando «Five More Minutes» y «What A Man Gotta Do» entre los gritos de sus fans.

Boyz II Men volvieron al escenario junto a Tyler The Creator , que presentó una puesta en escena imponente.

Usher y FKA Twigs protagonizaron otro de los momentazos, pero no precisamente en el buen sentido: su homenaje a Prince fue algo más que descafeinado.

Camila Cabello estuvo correcta en una interpretación de «First Man» sin demasiados artificios, que terminó en un emocionado abrazo a su padre, que estaba viéndola en primera fila.

Una de las actuaciones más esperadas fue la de Billie Eilish , que anoche batió el record de juventud entre los candidatos de la historia de los Grammy: 17 años. Vestida de Gucci, realizó una estremecedora e intimista interpretación de «When The Party’s Over».

Sin duda, uno de los instantes para el recuerdo fue el inesperado reencuentro entre Aerosmith y Run DMC, autores del primer gran experimento de fusión de rock y rap, «Walk This Way». Lástima que Steven Tyler (que saludó en las butacas a Lizzo con un sonoro "Te amo") no se mostrase demasiado en forma al micrófono en «Living On The Edge».

mmEl momento coral de la noche vino de la mano de Lil Nas X & Billy Ray Cyrus, que cantaron su megahit «Old Town Road» con las estrellas del K-Pop BTS, además de con Mason Ramsey, Diplo, Young Thug y Nas. Musicalmente fue lo menos interesante, pero fue la mejor puesta en escena de la ceremonia.

Demi Lovato hizo una actuación en solitario, y John Legend, DJ Khaled, Meek Mill, Roddy Ricch, Kirk Franklin y YG rindieron tributo a Nipsey Hussle, con homenaje añadido a Kobe Bryan y su hija en las pantallas gigantes.

A nuestra Rosalía la dejaron casi para el final. Y la catalana estuvo a la altura de las circunstancias, dejando huella una vez más en las altísimas esferas de la industria.