Mortier: «Este montaje de "Macbeth" es para un público inteligente»
El Teatro Real se adelanta al bicentenario de Verdi con el estreno el próximo domingo de esta ópera
Mortier: «Este montaje de "Macbeth" es para un público inteligente»
El Teatro Real se adelanta a las celebraciones del bicentenario del nacimiento de Giuseppe Verdi, que comenzarán en 2013, con el estreno este domingo -estará en cartel hasta el 23 de diciembre- de «Macbeth», con libreto de Maria Piave y Andra Maffei, inspirada en ... la obra homónima de Shakespeare.
Es la segunda vez, desde su reapertura, que este título sube al escenario del coliseo madrileño. La primera fue en 2004 y lo hizo en una nueva producción, firmada por Gerardo Vera , que contó con la batuta de Jesús López Cobos . Aparcado ese montaje en el almacén, ahora llega en una coproducción entre la Ópera de Novosibirsk (donde se estrenó en 2008 con un reparto íntegramente ruso) y la Ópera Nacional de París (Mortier vuelve a tirar de fondo de armario), con el mismo reparto que se vió en la capital francesa: Violeta Urmana , como Lady Macbeth, y Dimitri Tiliakos , en el papel Macbeth.
«No es una casualidad que el primer Verdi que presente yo aquí sea "Macbeth". Verdi luchó siempre contra las convenciones. Es en esta ópera donde por primera vez se muestra revolucionario en todos los aspectos: musicalmente y eligiendo como base una obra de Shakespeare», explicó ayer el director artístico del Real, Gerard Mortier, para el que esta partitura es una de las más importantes del compositor italiano, que ahora vuelve a Madrid bajo la relectura de uno de los directores de escena más interesantes -y algo polémico- del circuito internacional (se presentó en el Real con «Eugene Oneguin» y repetirá esta temporada con «Don Giovanni» ).
Mortier, bastante comedido en la última comparecencia con la prensa, donde anunció la cancelación de «La flauta mágica» por la Filarmónica de Berlín, no pudo ayer reprimir el enfant terrible que lleva dentro y avisó que «esta es una producción creada para un público inteligente». Y aconsejó «a los que vienen al Real a escuchar arias de bel canto que mejor que se queden en casa».
Reflexión sobre el poder
La obra es una reflexión sobre el poder -«con este título se cierra el círculo abierto por "La clemenza di Tito", indicó Mortier-, en el que el héroe Macbeth, a su regreso del campo de batalla, recibe laureles y la predicción de un grupo de brujas. Predicciones que una a una se irán cumpliendo y que convertirán a Macbeth, obsesionado por el poder, en un asesino.
Mortier: «Violeta Urmana ha sido para mí una revelación como cantante y como actriz»
«Es una relectura de cómo se presenta la maldad en nuestro tiempo, que tiene más que ver con la película "Dogville" de Lars von Trier» , indicó Mortier, para quien en este montaje se produce una gran combinación «de cantantes que son además buenos actores. Para mí Violeta Urmana ha sido una revelación como cantante y actriz», aseguró.
Tcherniakov, por su parte, reconoció que al principio no le interesó mucho la obra y que se quedó «perplejo» cuando se la propuso Mortier.La obra en sí le suscito al director ruso casi un centenar de preguntas que tuvo que ir poco a poco descifrando. La principal incógnita era por qué un héroe como Macbeth termina perdido en sus propias miedos e incertidumbres, y quiénes son los responsables de que esto suceda. Si en el libreto original son las brujas las responsables de que el protagonista se transforme en un asesino, para el director de escena, que no cree «en lo sobrenatural», éstas podrian ser sustituidas hoy por algo más cotidiano, «como los amigos, vecinos..., que forman un colectivo. Y yo siempre tengo miedo de los colectivos. El mal sale de ellos», sentenció Tcheniakov, que ha situado la acción en una pequeña ciudad, «da igual de qué país», a la que llega Macbeth y en la que primero «es bien acogido por este colectivo, que después le tienta, más tarde le manipula y juega con él, y del que dependerá cuando empiece a cometer asesinatos».
Currentzis: «Verdi vuelve en esta ópera a la cocina asceta italiana sin aditivos»
En cuanto a la partitura, para Teodor Currentzis , que se está convirtiendo en un habitual de la temporada del Real, Verdi vuelve en ella «a las formas renancentistas de la composición, con la incorporación de música popular de la época, un folclore ruidoso al estilo del flamenco. Vuelve a la cocina asceta italiana sin aditivos».En la obra se aprecia, según el director ruso, «la insistencia del compositor en la creación de un verdadero drama muisical, en el que no quiere gustar ni influir de manera sentimental en el público» . También recordó a un Verdi muy exigente con los músicos, «con los que ensayaba hasta seis horas antes del estreno, o incluso pedía a los cantantes repetir algunas partes minutos antes en el foyer, escondidos bajo una capas negras para que el público no les reconociera».
Completan el reparto, Dmitry Ulyanov, Marifé Nogales, Stefano Secco, Alfredo Nigro, Yuri Kissin y David Moreno , entre otros. Hoy, a las 19,30, se celebrará, dentro del ciclo Enfoque, un debate sobre la ópera de Verdi, en el que intervendrán Teodor Currentzis, Dmitri Tcherniakov y Boris Ignatov. La función del día 11 de diciembre será retransmitida en directo por Radio Clásica.
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