Coldplay, de la épica a la melancolía con «Ghost Stories»

Son las nuevas estrategias de mercado, pero lo importante es el nuevo sonido que destila un grupo hasta ahora caracterizado por los himnos de estadio. Los espectros a los que hace alusión el título no se refieren a los seres del más allá, sino a esos fantasmas del pasado, aunque sean del pasado reciente, que asustan casi más que aquellos otros. Chris Martin hace que su herida supure a través de las nueve intensas canciones −doce en la versión «deluxe»− de que consta el álbum. Así, el primer vídeo, el de «Magic», está rodado en blanco y negro, una atmósfera alejada del mundo multicolor de «Mylo Xyloto» . La ruptura, incluso, estuvo a punto de crear un serio problema en el seno de la banda, como reconoció el propio Martin en una entrevista para la BBC: «Hubo un momento en el que sentí que estos fantasmas me iban a hundir, a arruinar mi vida y las de las personas de mi alrededor»

Resta por comprobar si estos cambios convencerán a sus fans de siempre, seguidores de ese estilo heredero de U2 . Puede ocurrir también que los que no comulgaban con ese alarde cromático ahora empiecen a apreciar las virtudes musicales de los creadores de «Viva la vida». Algo así ha ocurrido con las críticas publicadas hasta el momento, divididas entre las que aplauden este enriquecimiento sonoro y los que observan falta de pegada. En cualquier caso, se trata de un acto de valentía en una formación con tendencia a repetirse.