Un libro recoge la voz silenciada de la «Generación Mao»
El miedo a la opresión política ha mantenido silenciadas varias generaciones de chinos que, por primera vez, hablan de sus vivencias durante el periodo de la China Roja en el libro «Generación Mao» gracias al trabajo de campo de la escritora Xinran.
Han sido veinte ... años de entrevistas a más de cincuenta personas, de conversaciones dificultadas por la incomunicación que impera en China pero, convencida de la trascendencia de este material, Xinran (Pekín, 1958) nunca tiró la toalla.
Se trataba de explicar un episodio de la historia que marcó a generaciones de chinos y que, de hecho, parece no estar superado aún: la revolución comunista de Mao Zedong.
«En China siempre hemos creído que los problemas proceden de tu boca», explica Xinran a Efe en un inglés perfecto, lo que hace que la conversación entre chinos sea tan pobre que «la mayoría no sabe nada sobre la historia y vida de sus abuelos» .
Un testamento a la dignidad
Aterrada por la idea de que la verdad de la historia moderna de China pudiera quedar enterrada con la generación de su padre, la autora de «Nacer mujer en China» o «En las montañas sagradas» propone en «Generación Mao» (Emecé)
un testamento a la dignidad de las vidas de sus conciudadanos
«¿Podría obtener un permiso del gobierno para hablar con usted?, ¿Hay una garantía oficial que me proteja?». Estas son algunas de las preguntas que los entrevistados hicieron a la escritora, que llegó a estar días enteros para conseguir la respuesta a una sola pregunta.
Xinran recorrió el país de este a oeste y entrevistó a curanderos, empresarios del petróleo, taxistas, linterneros, antiguos generales, zapateros, presos del régimen y también a celebridades, que finalmente no incluyó en las veinte historias definitivas del libro por querer hacer un retrato de «gente normal ».
«Muchos de los entrevistados lloraban tras las entrevistas», relata Xinran, a la que sus familiares pedían explicaciones, incriminándola.
Ella les respondía: «Les he sacado un peso que tenían en el corazón, es una cosa que tenían guardada y que nunca tuvieron la oportunidad de gritar».
Aunque no esconde su aversión por la figura de Mao, la escritora quiso escuchar distintas voces, a las que respeta y de las que extrajo grandes enseñanzas.
Escuchando a sus interlocutores, Xinran comprendió el simbolismo que para muchos chinos tiene todavía el líder de la revolución comunista , cuyo retrato aún reina en la plaza Tiananmen junto a las largas colas de chinos que visitan diariamente su mausoleo.
Según la escritora, quienes vivieron la «China Roja» de Mao pertenecen a una generación sin comida: «el 78% de la población es campesina, la mitad de los cuales no están educados y cuando les preguntas por libertad o ideología se ríen de ti». «¿Cómo puedes hablar del pensamiento sin comida en el estómago?», le preguntaban.
Así pues, «Generación Mao» es un retrato íntimo sobre la China moderna que, pese a maquillar con «ropa nueva» su pasado, no es capaz de mirar atrás y contar su historia a nuevas generaciones que les permita avanzar hacia el futuro.
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