GOT7: en busca de la fama y el éxito hasta caer exhaustos

GOT7 es actualmente una de las formaciones más importantes del pop surcoreano (aunque uno de ellos es chino, otro tailandés y otro estadounidense), un género que exige un enorme sacrificio físico y mental a sus estrellas, que viven sometidas a un estricto régimen de trabajo e incluso de estilo de vida, impuesto por sus compañías de discos. Deben mantener una imagen acorde a su personaje dentro y fuera del escenario, y la enorme presión hace que sean muchos los casos de agotamiento extremo, depresión e incluso suicidio en este movimiento musical. En GOT7, la principal víctima de este estajanovismo es Jackson, que ha vivido numerosos episodios preocupantes.

En septiembre de 2016 acabó en urgencias tras sufrir un accidente de coche mientras escapaba de los paparazzi, y desde entonces sus ingresos hospitalarios se han repetido con mucha frecuencia. En marzo de 2017 se desmayó durante un encuentro con fans, que se quedaron perplejos viendo a su ídolo desplomado sobre una mesa. Sus guardaespaldas lo trasladadon a su camerino, pero empezó a vomitar y tuvo que ser trasladado al hospital. En abril de 2018, su compañía JYP Entertainment emitía un comunicado para explicar una nueva hospitalización, por « cansancio extremo ». Y en octubre del mismo año, anunciaba su retirada de las acciones promocionales del grupo por el mismo motivo.

La gira de GOT7 está a punto de terminar, pero no parece que vayan a tener descanso: ayer mismo, JYP Entertainment anunció el «regreso» del grupo para este mismo noviembre.

GOT7 actuarán en el Wizink Center el próximo miércoles 16 de octubre a las 19:30