'El coraje del matiz', de Jean Birnbaum: contra la «tiranía del estereotipo»

El maniqueísmo ideológico y la mentira existencial suelen ir de la mano. Como diría Camus: «Vivimos en el mundo de la abstracción, el mundo de los despachos y de las máquinas, de las ideas absolutas y de los mesianismos sin matices. Nos asfixiamos entre gente que cree tener absolutamente la razón».

ENSAYO

'El coraje del matiz'

• Autor Jean Birnbaum
• Editorial Encuentro
• Año 2024
• Páginas 134
• Precio 16 euros

En el guirigay de las evidencias que han dejado de serlo, no hay nada más radical que el matiz como ejercicio de la libertad crítica, como audacia ordinaria. Esta es la invitación, en forma de mano tendida, que nos hace Jean Birnbaum, redactor jefe de «Le Monde des Livres». Un libro, el primero suyo traducido al español, en el que se acerca a una serie de buenos 'matizadores' de la historia reciente del pensamiento y de la literatura para expropiar su pensamiento en beneficio de todos. A saber, Albert Camus, George Orwell, George Bernanos, Charles Péguy, Hannah Arendt, Raymond Aron, Germaine Tillion y Roland Barthes. Ahí es nada.

¿Por qué estos autores y no otros? Porque este libro es un canto a la amistad, que siempre es relación. La amistad como el único espacio donde puede desplegase «la antigua virtud de la moderación». De lo que se trata es de un sano juego de la palabra libre que hace al hombre libre, una palabra libre que no es posible sin la independencia de juicio y criterio, y poco o un mucho de amor apasionado a la verdad. He aquí un manifiesto contra «la tiranía del estereotipo».

Hablamos de la literatura como decisión moral frente a los dogmatismos, signo de cobardía, y del fanatismo, signo de impotencia. Que expresemos nuestro desacuerdo no implica que seamos unos brutos, ni unos antisistema. Olvidamos con demasiada frecuencia que no puede haber pensamiento sin diálogo con los demás y, para empezar, con uno mismo.

Este libro es una apuesta que implica disidencia, inteligencia, ironía y pasión por la fragilidad sentida de lo humano. Una forma de ser y de actuar que permite el ejercicio de la mirada sobre una realidad que desconcierta, que no es sospecha sino sorpresa. La literatura permite así entender la mirada como la condición de posibilidad del encuentro con el otro, una ética del encuentro sin sesgos cognitivos, sin marcos mentales.

Jean Birnbaum ha querido dar voz a la marginalidad de quienes no se someten a la tiranía del estereotipo. Un canto a los espíritus audaces dentro de la política, de la historia, del periodismo, que aceptan vivir en la contradicción y que apuestan por pensar antes que odiar, que se niegan a instrumentalizar las palabras. Por eso Georges Bernanos, escribió en 140, en su 'Carta a los ingleses': «Puede que ya no haya palabras sencillas, como ya no hay pan de verdad. ¡Qué le vamos a hacer! Si de verdad se han usado demasiado las mejores, ¡pues bien, haremos otras!, haremos palabras libres, ¡para hombres libres!».