«Parece que alguien ha metido la pata y la ha metido bien»

-¿Puede haber también una ilegalidad?

-Ya veremos, cuando analicemos el tema desde el punto de vista jurídico e incluso cuando llegue al Tribunal de Cuentas, si, además, es una ilegalidad. Eso es lo que hay que ver, si se da el salto de la irregularidad a la ilegalidad. No me parece que estemos muy lejos de que sea una ilegalidad.

-¿Hechos como este ponen de manifiesto la hipocresía del discurso del Gobierno cuando habla de luchar contra la pobreza?

-Esto ha demostrado lo floja y débiles que son las convicciones del Gobierno. Por una parte, hace grandes discursos y viajes a África y América Latina y, después, no duda en detraer fondos para este tipo de actividades, que yo no sé si hay que hacerlas o no, lo que si sé es que no hay que hacerlas con estos fondos.

-¿No le plantea sospechas que, curiosamente, Miquel Barceló haya sido uno de los artistas que apoyan políticamente a Zapatero?

-Nos preguntamos si, para un proyecto de esta envergadura, no hubiera sido lógico convocar un concurso y hubieran podido concurrir otros excelentes artistas. Y, por qué no decirlo, para quitar la sombra de duda de que, curiosamente, se otorgue una obra de muchísimo dinero a una de las personas que salió en la foto con la famosa ceja de Zapatero.

-¿No cree que el Gobierno no tiene mucho interés en aclarar esta polémica?

-Por lo que vamos sabiendo, parece que alguien ha metido la pata, y la ha metido bien y, como no tienen argumentos sólidos para explicarlo, intentan establecer una estrategia de la confusión. El Gobierno va improvisando explicaciones pero el problema de fondo, de por qué se ha sacado el dinero de la caja de los fondos públicos, todavía no se ha aclarado. El Gobierno tiene que aclarar, cuánto antes, qué hace con los fondos de la lucha contra la pobreza.

-¿Qué pensó cuando el portavoz del PSOE justificó la inversión millonaria en la cúpula de Barceló como un reflejo de la imagen real de España en el exterior?

-Si toda la imagen de España dependiera de pintar o no una sala en el exterior, estaríamos muy débiles en el mundo. No creo que la gente que se vaya a sentar en esta sala, cuando mire al techo, tenga toda la visión de lo que es España y se alivie la pobreza.