política
Referentes pajinistas del PSPV buscan una salida en UPyD
La consolidación del lermismo lleva a varios dirigentes a buscar un futuro lejos del PSPV
El PSOE de Elche, que no hace mucho era uno de los bastiones del socialismo valenciano, no vive precisamente sus mejores días. La pérdida de la Alcaldía en las pasadas elecciones municipales de 2011, que posibilitó el primer mandato municipal del PP en la ciudad de las palmeras en la historia de la democracia, y la poca sintonía entre el líder del PSPV, Ximo Puig, y los responsables de la ejecutiva local, han generado un clima de confusión entre la militancia.
Hasta el punto de que algunos miembros del partido, que en el pasado reciente ejercieron como referentes del PSPV en la provincia, viven la situación actual con una desconfianza absoluta sobre el futuro de la federación socialista valenciana –y sobre su propio papel en dicho futuro–. A decir de algunos de ellos, actualmente se encuentran «en tierra de nadie», una circunstancia que ha llevado a varios exdirigentes a pulsar sus opciones en otras siglas en auge.
Uno de los movimientos más significativos en este sentido ha sido el de Alejandro Pérez, exportavoz municipal y otrora «número dos» del exalcalde Alejandro Soler –hoy en la Diputación–, que tras constatar el poco margen de maniobra que le queda ante la cúpula de Antonio Rodes (secretario local con el beneplácito de Soler) ha establecido conversaciones para buscarse un futuro político en UPyD –que tiene como coordinadora en Elche a Marysol Coves–.
Pérez no ha querido hacer oficial este acercamiento porque su condición actual de concejal en el grupo socialista del Ayuntamiento podría contribuir a «remover aún más las convulsas aguas del partido», en palabras de un militante próximo al antiguo «delfín» del PSOE ilicitano.
Malestar palpable
El descontento de Pérez con su actual partido es palpable. Durante los plenos municipales se le puede ver poco hablador e incluso «un poco ido». El abogado –renunció a la dedicación exclusiva en el Consistorio para poder seguir ejerciendo– está actualmente más ocupado en sacar adelante su despacho profesional que en la política, según fuentes próximas.
Quizá el punto de inflexión lo marcó el día en que el exalcalde Soler movió ficha para que Pérez fuese destituido del consejo de administración de PIMESA (Promociones e Iniciativas Municipales de Elche), la principal empresa municipal de la ciudad de las palmeras.
Pero el distanciamiento entre ambos, antes inseparables, viene de lejos. En su día, Pérez rechazó por razones laborales la oferta de Soler para que fuera su sucesor como portavoz en el grupo socialista de Elche –una vez consumado su paso a la oposición–. Y al parecer este hecho no sentó nada bien al exalcalde, que visto lo visto, prefirió apostar por Antonio Rodes –procedente del movimiento comunista de Elche y crítico con el exalcalde y predecesor de Soler, Diego Macià–, al que eligió por su «carisma mediático» y su trabajo en el grupo municipal.
Paradójicamente, según las fuentes consultadas la relación entre Rodes y Soler dista mucho de ser buena, ya que se ha generado cierta tensión sobre quién toma las riendas del socialismo ilicitano. Y mientras, el regreso de la corriente lermista a la cúpula del PSPV y el refuerzo que esto ha supuesto para la «vieja guardia» en Elche –la presidenta del partido, Teresa Sempere, y el portavoz en las Cortes, Antonio Torres, fueron propuestos por Macià– complica sobremanera el futuro político de los que no hace mucho se declaraban «pajinistas».

